La cueva del Yeso continúa sin protección. Cualquier persona puede acceder a su interior y llegar a provocar destrozos o abandonar residuos. A estos problemas se une también el riesgo que puede entrañar para un desconocido en la espeleología el acceso a grutas que entrañan peligro. Sorprende que la Delegación de Medio Ambiente aún no haya reconocido como monumento natural esta singularidad geológica pese a que se solicitó hace años.