Desde las siete de la mañana y hasta pasada la una del mediodía, cientos de jóvenes de Dos Torres elaboraron ayer quince alfombras de sal coloreada, conectadas entre sí por flores también hechas del mismo material.

Todo ello a lo largo de los 550 metros de recorrido entre la Plaza de la Villa y hasta la ermita por donde desfiló en la tarde de ayer el patrón de Dos Torres, san Roque, portado a hombros. El Ayuntamiento repartió 4.500 kilos de sal y los tintes con los colores rojo, amarillo, azul, verde y negro, con cuya mezcla se logran el resto de tonalidades.

El alcalde, Manuel Torres, destacó que este año se cumplía el 25 aniversario del récord Guinness que se logró en 1993 con la alfombra más larga del mundo, aunque en aquella ocasión se hizo con serrín. Precisamente, coincidiendo con esta efeméride, el Ayuntamiento ha hecho entrega de una placa a Antonio Cañadillas, promotor de esta iniciativa, que ya se ha convertido en una seña de identidad de Dos Torres.

Las alfombras que ayer se confeccionaron miden 3 metros de largo por 2 de ancho, aunque destaca la más grande, con el escudo de la localidad, de 6 metros de largo y 4 de ancho en el centro de la Plaza de la Villa.

Toda una atracción que llevó ayer hasta la localidad, que está celebrando su feria, a numerosos visitantes para contemplar estas efímeras obras de arte, que se deshacen al paso de la procesión.

Un año más los grupos de jóvenes contaron con la colaboración de los vecinos, dispuestos a apoyarles con agua o con cualquier utensilio que les ayudara en su tarea.

Entre las alfombras, varias recogían lemas por la igualdad entre hombres y mujeres y otros como «Tú no brillas sino deslumbras», «El valor de la amistad», «Tuve un sueño», «Deja que se note que eres diferente por tu corazón» o el lema de las fiestas Dos Torres: «El plan perfecto».

A la altura del hogar del pensionista se colocaron también colgaduras y cerca una alfombra que recreaba el medio marino. Osos, corazones y distintos dibujos alusivos a Dos Torres en este singular recorrido.