El presidente del Consejo Regulador Montilla-Moriles, Emilio Recio, renunció ayer a su cargo en el curso de un pleno extraordinario en el que expuso sus razones, de tipo profesional, a los consejeros. Recio fue elegido por unanimidad de los miembros del consejo tras la dimisión presentada por Manuel Pimentel, que presidió el organismo vinícola durante los 6 años anteriores. En la misma sesión en la que se aceptó la dimisión de Pimentel, celebrada el pasado mes de julio en Córdoba, fue elegido por unanimidad Emilio Recio. Pero a pesar del apoyo unánime conseguido, la Junta de Andalucía no ha dado hasta el momento el placet requerido por el reglamento junto con la publicación en el BOJA de su nombramiento.

Recio ha presentado su renuncia al cargo al entender que, puesto que forma parte del consejo regulador como funcionario de la Consejería de Agricultura, donde es jefe del servicio de ayudas de la Delegación provincial, se pueden producir "situaciones administrativas de conflicto de intereses al simultanear ambas responsabilidades".

Solo por este motivo, reconoce el consejo en un comunicado, "deben prevalecer sus responsabilidades como jefe del servicio de ayudas sobre la presidencia". El organismo rector de la Denominación de Origen Montilla-Moriles ha expresado su "profundo respeto a la decisíon adoptada por Emilio Recio" y ha lamentado que la propuesta avalada por todos los consejeros "no haya llegado a feliz término como era intención de todo el sector". Al mismo tiempo, anuncia que se reunirá próximamente para proponer, de entre sus vocales, un nuevo presidente.