La última fase de remodelación de la calle Corredera, que afectará al tramo que discurre entre el callejón de El Peso y la Plazuela de la Inmaculada, obligará a la Policía Local a reordenar el tráfico en la zona centro de Montilla. Las obras, que serán realizadas por la empresa General de Estudios y Proyectos a partir del lunes, contarán con un plazo de ejecución de cuatro meses y han llevado al área de Seguridad Ciudadana a diseñar una nueva reordenación del tráfico para tratar de agilizar la circulación de vehículos.

De esta forma, la calle Ballén cambiará su sentido para permitir que los vehículos que circulan por Puerta de Aguilar puedan desembocar en las calles San Francisco Solano o Enfermería, que se mantienen igual.

A su vez, la calle Escuelas vuelve a invertir el sentido de circulación desde el mercado de abastos hasta la Cuesta de las Caballeras, si bien su uso queda reservado exclusivamente para los residentes y usuarios de cocheras.

Por otro lado, la Puerta de Aguilar quedará limitada a la circulación de vehículos con una longitud máxima de 7 metros y una altura máxima de 3’5 metros.

Los nuevos cambios en el tráfico, que fueron comunicados por el equipo de gobierno a vecinos y comerciantes de la zona centro durante el transcurso de una reunión que tuvo lugar en la tarde del pasado martes, también prevén el cierre al tráfico de la Corredera desde la calle Ballén hasta San Fernando, invirtiéndose el sentido de la circulación desde la plaza de La Rosa.