Tras el último accidente en la N-432 en el que perdieron la vida dos jóvenes de 28 años, el Pleno pidió ayer de nuevo al Gobierno la reconversión en autovía de la nacional. En la moción conjunta explican que los Presupuestos Generales del Estado se encuentran nuevamente en fase parlamentaria, por lo que sería muy importante que se pudiera incluir en los mismos los proyectos que afectan a la N-432 y tuvieran su reflejo en las cuentas del Estado. Insisten en que la seguridad vial de la carretera es «muy deficiente» debido al volumen de tráfico que discurre por ella, al mal estado de conservación de la vía y al tránsito de vehículos lentos y pesados, así como a su propio trazado, muy sinuoso en muchos de sus tramos, y que suponen un riesgo para los usuarios, que se traduce en los numerosos accidentes que se vienen produciendo en la misma, muchos de ellos con fatal desenlace.

Por ello, el Pleno aprobó instar al Gobierno de España a que retome tanto el proyecto de reconversión en autovía de la N-432 como la construcción del enlace de la N-432 con la carretera de Cañete de las Torres. Además, que incluya en los presupuestos para el 2018 la partida necesaria para retomar e iniciar ambos proyectos. Instan al Gobierno para que, hasta tanto se desarrolle el proyecto, se dote la partida presupuestaria necesaria para la mejora del pavimento y eliminación de los puntos negros existentes en la N-432. Por último, piden que fije un calendario de actuación.

El Pleno aprobó también la solicitud de la declaración de la Semana Santa de Baena como Fiesta de Interés Turístico Internacional. Además, tomó posesión del acta de concejal Guadalupe Salamanca Rojano (PSOE).

Sobre la mesa se dejó una moción de apoyo a la declaración de la tamborrada patrimonio inmaterial de la humanidad. Aunque por la mañana, los diputados socialistas María Jesús Serrano y Antonio Hurtado reclamaron al Gobierno central, a través de una proposición no de ley, que apoye totalmente al Consorcio Nacional de los Pueblos del Tambor y el Bombo, por ser las tamborradas la única candidatura que presenta España ante la Unesco.