La mayor parte de las infracciones detectadas por el Seprona en materia cinegética, que asciende a 131 casos, se refieren a vulneraciones de la normativa, como caza sin licencia, cazar de noche sin autorización o en línea de retranca o la captura de especies distintas a las autorizadas.

Destaca también en el balance de la Comandancia que 12 sanciones tenían como origen la vulneración de la normativa reguladora de los animales de compañía y/o peligrosos, destacando la existencia de rehalas sin seguro obligatorio, 8 se debieron a infracciones en materia de armas, sobre todo, por llevar sin necesidad o sin justificar el motivo. Casi siempre, en este caso, se referían a episodios de furtivismo tanto consumados como detectados antes de la ejecución.