La polémica en torno a la privatización que la Junta de Andalucía pretende llevar a cabo en el comedor del CEIP Ramón Hernández, de Cañete de las Torres, sigue marcando la incertidumbre de los padres. Desde el miércoles mantienen una huelga indefinida y prohíben a sus hijos asistir a clase hasta que no se solvente el problema del comedor escolar. El portavoz de los padres, José Antonio Parras, comentó a este periódico que "hay que consensuar una solución beneficiosa para los alumnos y las familias", ya que consideran que la propuesta de la Consejería de Educación les perjudica notablemente, no solo en la calidad del servicio, sino también en las instalaciones, y porque afecta a seis personas que trabajan también en el mismo.

El comedor es de titularidad municipal, por lo que la Junta ha optado por ofrecer las comidas en el salón de actos del centro, a lo que los padres se niegan. El alcalde, Félix Romero, informó ayer de que el miércoles por la noche recibió la llamada de la delegada, Manuela Gómez, y comentó que "se niega a reunirse conmigo en Cañete ante las madres y padres". Asimismo, matizó que la delegada ha convocado para el próximo lunes una reunión con el director del colegio y el AMPA, "a la que le he pedido asistir y me ha dicho literalmente que no". La delegada de Educación, Manuela Gómez, dijo que "le hemos dado todo tipo de soluciones al alcalde por escrito y rehúsa todas". Respecto a la reunión del lunes, Gómez dijo que ha sido convocada por el AMPA y que se reunirá con este colectivo y luego con el alcalde. Ahí pretende la delegada que quede todo claro.