Manteniendo una tradición que se remonta al primer tercio del siglo XVI, Priego celebró ayer con gran intensidad la festividad del Corpus Christi, siendo una de las pocas localidades de nuestro país, junto a Granada, Sevilla y Toledo, en la que debido a su arraigo aún se mantiene en jueves.

La celebración tuvo ayer su jornada central con el desfile de Jesús Sacramentado en el artístico templete procesional que realizara el platero granadino Luis de Beas en 1592. El cortejo partió a las diez de la mañana desde la parroquia de la Asunción y en él tomaron parte, junto a los pequeños que este año han tomado su Primera Comunión, representantes de las distintas hermandades y cofradías de la localidad, así como autoridades políticas y militares, por lo que estuvieron representados todos los estamentos de la sociedad prieguense.

En el desfile se vivieron momentos destacados tanto en la plaza de la Constitución, donde los seises de la cofradía de la Soledad danzaron en honor del Santísimo Sacramento, como en el barrio de la Villa, primorosamente engalanado para la ocasión por sus vecinos, que de manera paralela a los actos religiosos han organizado durante el miércoles y jueves una serie de actividades para todas las edades. En relación a los residentes en este histórico barrio, como es tradicional, el Ayuntamiento entregó una placa de reconocimiento a la vecina de mayor edad, en este caso Carmen Pérez Ariza, con 97 primaveras muy bien llevadas a sus espaldas, mientras que en el polo opuesto, la placa al vecino más joven fue entregada a la madre de Hamza Toba El Abridi, de tres meses.