El Juzgado de lo Penal número 3 de Córdoba prevé celebrar este miércoles el juicio a una mujer acusada de un delito relativo a la protección de la flora, fauna y animales domésticos y lesiones por imprudencia grave, tras supuestamente herir a un guarda en una cacería nocturna no autorizada. La Fiscalía solicita para ella una pena de un año de cárcel, cuatro años de inhabilitación para el derecho a cazar y otros tantos años de privación o porte de armas.

Según recoge la calificación del Ministerio Público, a la que ha tenido acceso Europa Press, la procesada estaba en la madrugada del día 15 de septiembre de 2015 en una finca del término municipal cordobés de Almodóvar del Río para realizar una cacería nocturna, de modo que avisó al administrador de la finca y al guarda de la misma para que le acompañaran, para lo cual contaba con un vehículo en el que iban a cargar las reses que pudieran ser abatidas.

No obstante, el fiscal detalla que la mujer "no contaba con permiso de ningún tipo de la autoridad competente, siendo época de veda", al tiempo que llevaba un rifle de la marca 'Brno' al que acopló un silenciador y con la ayuda de un foco luminoso abatió a una muflona.

Tras ello, ordenó al guarda que fuera a recogerla y cuando fue a cargarla en el vehículo, con la ayuda del administrador, la acusada, que previamente había cargado de nuevo el rifle, lo dejó apoyado "sin seguro alguno y de forma inestable" en el coche, cuando "en un momento dado golpeó el mismo de forma no intencionada cuando se encontraba manipulando su teléfono móvil, lo que provocó que el arma cayera al suelo y se disparase", alcanzando al guarda.

Como consecuencia del disparo, el hombre, de 36 años, sufrió una herida en el talón, que le tuvieron que reconstruir quirúrgicamente. Ante ello, ha necesitado un total de 676 días de curación, de los que 660 ha estado impedido para sus ocupaciones habituales y 16 ingresado en centro hospitalario.