El alcalde de Baena, Jesús Rojano, afirmó ayer que respeta los criterios judiciales, tanto de la fiscalía como del juez, y que espera que se celebre el juicio cuanto antes para "aclarar dudas". Rojano recuerda que el Ayuntamiento inició en su momento un expediente disciplinario a los dos funcionarios, que está paralizado hasta que se resuelva la tramitación judicial. Algo que quizás no se retrase demasiado, ya que en el auto que decreta la apertura del juicio oral por parte del juez de Baena se emplaza a las partes para que en el término de quince días comparezcan ante el tribunal competente para el juicio. Contra este auto no cabe recurso alguno, sin perjuicio de las cuestiones previas al juicio que puedan plantearse ante el tribunal del jurado. El procedimiento, que consta de más de 16 tomos de instrucción, comenzó en el año 2007 con la investigación de la presunta trama constituida entre los tres acusados. Concretamente, y tal como recoge el auto, el día 20 de julio del 2007 el empresario "espontáneamente relató estos hechos ante los agentes de la Guardia Civil".