Ampliar treinta minutos el horario de funcionamiento de las terrazas y veladores. Esa es una de las principales alegaciones que ha planteado al Ayuntamiento la nueva Asociación de Hosteleros de Montilla (Ahosmont), tras analizar un primer borrador de la ordenanza municipal que, en adelante, tratará de regular la ocupación temporal de la vía pública por parte de bares y restaurantes.

El colectivo que preside Antonio Jurado expresó ayer su satisfacción por la "buena acogida" que el alcalde, Federico Cabello de Alba, mostró ante las propuestas del sector, que reclama ampliar el cierre de las terrazas hasta las dos de la madrugada en temporada estival.

Junto con la ampliación de horarios, los hosteleros plantearon al alcalde la posibilidad de proteger el material de sus terrazas con un toldo estándar, similar para todos los establecimientos, para "contribuir a potenciar la imagen de la ciudad", según indicó el presidente de Ahosmont, quien avanzó que las lonas protectoras podrán incorporar logotipos o eslóganes turísticos marcados por el propio Consistorio.

Esta última medida, que deberá ser ratificada por el Pleno, persigue "ampliar la seguridad del material de las terrazas y contribuir a que la imagen de la ciudad sea mejor", según Jurado.

La implantación de estas nuevas cubiertas evitaría que los establecimientos que presentan dificultades para almacenar las mesas, sillas y sombrillas que prestan servicio en la calle se vean obligados a recoger sus terrazas al finalizar la jornada.

El colectivo de hosteleros --que aglutina ya a más de una treintena de empresarios-- confía en exponer sus alegaciones durante el transcurso del próximo pleno de la Corporación municipal, que tendrá lugar el 5 de noviembre, al objeto de que los grupos políticos puedan conocer con detalle las razones que han llevado al sector a plantear estas medidas al Consistorio.

Hasta la entrada en vigor de la ordenanza, los hosteleros que no recojan sus terrazas una vez finalice la jornada comercial no tendrán que enfrentarse a ninguna sanción, gracias a la "medida cautelar" que el propio alcalde anunció a los representantes de Ahosmont.