El alcalde de Baena, Luis Moreno, mostró ayer a los medios de comunicación los restos arqueológicos encontrados en el santuario ibérico de Torreparedones. Más de treinta exvotos y miles de fragmentos de cerámica "vienen a corroborar la importancia de este yacimiento", comenta el arqueólogo municipal, José Antonio Morena.

Morena señaló que en la misión de 1988 no se excavó al completo el santuario y ahora lo que hacen es completar la documentación de ese edificio. "Estamos descubriendo la estructura del templo, pero a la vez están apareciendo estas cosas, que son las que les dan contenido", manifestó.

La particularidad que tiene este edificio de culto son los exvotos de piedra, tallados a mano. Entre los hallazgos destaca un altar donde se realizaban una serie de rituales, como quemar ungüentos o perfumes.

La pieza está decorada por sus cuatro caras y en una de ellas tiene una escena con animales de la mitología griega. "Una pieza única, típica ibérica con escenas mitológicas, de unos 2.200 años antes de Cristo, aunque puede ser más antigua". La pieza estaba oculta y apareció junto a otro altar, éste de época romana. Morena añadió que aún queda mucho por excavar y espera encontrar más hallazgos.

REPERCUSION NACIONAL Por su parte, el alcalde reiteró ayer que Torreparedones es uno de los yacimientos que tiene "repercusión arqueológica nacional, uno de los grandes yacimientos de España". Recordó que además de la puerta que en su día se dio a conocer, lo que se ha encontrado ahora "es muy importante".

La puesta en valor de Torreparedones es un proyecto que se "lleva a cabo con recursos municipales, al igual que las excavaciones del castillo". Pero espera y desea que el apoyo de la Consejería de la Junta de Andalucía y del Ministerio de Cultura lleguen cuanto antes. Además afirmó que "Torreparedones necesita, exige, la participación de entidades privadas". Porque además de poner en valor el yacimiento, es necesario adecuar un museo y una infraestructra para poder visitarlo.

Por último, Luis Moreno declaró que para él es "apasionante y emocionante" el ver cómo nuestros ancestros se remontan a 5.000 años.