La Guardia Civil ha detenido a 22 personas de entre 17 y 40 años de nacionalidad rumana y de la misma familia como autores de hasta nueve delitos de robo, hurto de aceitunas y cooperación necesaria. Además, otra persona está siendo investigada como responsable del punto de compra de aceitunas.

La operación se ha desarrollado en las provincias de Córdoba y Sevilla, ya que aunque los robos de aceituna se cometieron en los municipios de Santaella, Aguilar, Montalbán, Fuente Palmera, Puente Genil y Moriles, los equipos ROCA que actúan en la provincia lograron interceptar en el punto de venta el lugar desde donde se distribuía la aceituna robada, en la provincia de Sevilla.

A principios del mes de noviembre, y coincidiendo con el inicio de la campaña de la aceituna en la provincia, la Guardia Civil tuvo conocimiento que se habían cometido varios robos y hurtos de aceituna en la zona suroeste de la provincia, concretamente en los términos municipales de Santaella, Aguilar de la Frontera, Montalbán, Fuente Palmera, Puente Genil y Moriles, lo que aconsejó a los investigadores de la Guardia Civil la apertura de la operación 'Oro líquido', que ha sido llevada a efecto por los Equipos Roca que operan en la zona centro y oeste de la provincia junto con las unidades afectadas por los robos, especialmente el Puesto de la Guardia Civil de Fuente Palmera y con la colaboración fundamental de la Guardería Rural.

El subdelegado del Gobierno, Primo Jurado, con los mandos de la Guardia Civil.

Las primeras investigaciones permitieron a la Guardia Civil saber que los autores formaban un grupo perfectamente organizado, entre cuyos integrantes había personas perfectamente conocedoras de la zona, incluyendo los lugares de depósito del fruto, las localidades y las pistas y caminos terrizos, que en caso de necesidad empleaban en su huida.

El grupo, tras reconocer la zona donde iba a cometer los hurtos de aceitun,a se desplazaba a la misma con furgonetas de gran capacidad y una vez cometido el hurto, abandonaban el lugar y se dirigían hacía los posibles puntos de compra donde esa misma madrugada o al día siguiente vendían la aceituna robada.

Durante el desarrollo de las investigaciones, la Guardia Civil pudo saber a través de la Guardería Rural de Guadalcázar, que se estaba produciendo mucho trasiego de vehículos, conducidos al parecer por personas de nacionalidad extranjera, sobre los que sospechaban que pudieran estar dedicándose al hurto de aceituna.

Esta información de la Guardería Rural permitió a la Guardia Civil localizar en una finca del término municipal de Guadalcázar tres furgonetas de gran capacidad y 11 personas que se dedicaban a la recolección ilegal de la aceituna los cuales, al detectar la presencia de la Guardia Civil en la zona, se dieron a la fuga en dos furgonetas, siendo interceptadas las dos en la provincia de Sevilla.

El avance de la investigación permitió localizar en una carretera de la provincia cuatro furgonetas de gran capacidad, que circulaban dirección Sevilla, que resultaron sospechosas, decidiendo los investigadores de la Guardia Civil seguirlas. Al llegar a una localidad de la provincia de Sevilla de madrugada, intentaron descargar la aceituna que transportaban en un punto de compra, procediendo los Guardias Civiles a la intervención de la aceituna, más de 13 toneladas que los ahora detenidos transportaban en el interior de las cuatro furgonetas y que habían sustraído de una finca de Puente Genil.

Asimismo, se procedió a la detención de los supuestos autores de los hurtos de aceituna, otras nueve personas, integrantes todos del mismo clan familiar, así como del encargado y un trabajador del punto de compra, como supuestos autores de un delito de receptación de aceituna y otro de cooperación necesaria en la comisión de hurtos.

Los ahora detenidos intentaron huir del lugar, no logrando su propósito. Seguidamente, la Guardia Civil procedió a la investigación del propietario del punto de compra, como supuesto autor de un delito de receptación, a la intervención de las cuatro furgonetas utilizadas por los ahora detenidos en sus desplazamientos y a la aprehensión de más de una tonelada de aceituna, de la que los encargados del punto de compra no pudieron acreditar su legítima procedencia. También, y por orden judicial, la Guardia Civil procedió al precinto del punto de compra.

Con estas detenciones la Guardia Civil, además de lograr la desarticulación de un grupo muy activo dedicado al hurto de aceituna, ha recuperado más de 16 toneladas de aceituna sustraída, que ha sido entregada a sus legítimos propietarios, ha logrado esclarecer nueve delitos de sustracciones del citado fruto y ha posibilitado con la investigación desarrollada que la Autoridad Judicial proceda al precinto de un punto de compra de aceituna de procedencia ilícita.