El Ayuntamiento de Baena ha llevado a cabo la consolidación de la Torre Morana, conocida como Montecillo, para lo que ha contado con la autorización de la Comisión Provincial de Patrimonio Histórico, ya que es un bien patrimonial que goza del máximo grado de protección legal, Bien de Interés Cultural, catalogada como yacimiento arqueológico.

La intervención ha consistido en el repaso de juntas de la fábrica de piedra, así como la colocación de piedras sueltas caídas de la fábrica, especialmente en el lado sur, junto a la puerta de acceso. También se ha reparado parcialmente la cubierta debido a la caída de una bovedilla del forjado colocado en 1993 y se ha reparado la reja de entrada. Para ello se han recolocado las piezas de las jambas sustraídas, además de la adecuación del entorno y el camino de acceso. El presupuesto de intervención ha sido de 24.000 euros, financiados con fondos europeos del plan Baniana II.

La Torre Monana es una atalaya medieval que servía para el control de la frontera castellana con el reino de Granada. Se asienta sobre un oppidum ibérico del que se conserva parte del recinto amurallado. Se sitúa a unos 5 kilómetros al NE de Baena en la carretera de Baena-Albendín, tiene una altura de unos 13 metros y su planta es cuadrada, de 5 metros de lado. Los muros que la conforman están ejecutados en fábrica de mampostería interior y exteriormente con relleno intermedio --el grueso total alcanza 1,20 metros--. Contaba con una escalera interior que servía de acceso a la planta superior, pero que actualmente se encuentra demolida, así como la bóveda superior, de la que solo quedan algunos restos. En 1993 se acometieron trabajos de restauración y consolidación ante el deterioro sufrido por la torre.

Esta actuación se enmarca en el proyecto de puesta en valor del patrimonio histórico de Baena que lleva a cabo el Ayuntamiento, en el que destacan Torreparedones y el Castillo.