La infraestructura que dará cabida al nuevo cuartel de la Guardia Civil de Puente Genil está pendiente de la dotación de energía eléctrica para su puesta en funcionamiento. Así lo ha hecho saber el alcalde del municipio, Esteban Morales, quien ha explicado que las gestiones necesarias con Endesa comenzaron a principios de año para la colocación de un nuevo transformador en el entorno del edificio. En este sentido, Morales indica que Endesa está culminando el proyecto técnico que deberá presentar al Ayuntamiento en un breve plazo de tiempo para adjudicar la licencia de una obra simple por la colocación de un elemento prefabricado.

Una vez resuelta dicha cuestión, el siguiente paso que deben dar tanto el Ayuntamiento como el Ministerio del Interior es proceder a la tasación del nuevo edificio, situado en la entrada norte a Puente Genil, y también a la del antiguo, ubicado en la zona centro de la localidad. En este proceso, fuentes municipales estiman que la institución local recibirá una compensación por parte del Ministerio del Interior habida cuenta de las mejoras con las que se ha complementado la futura residencia de la Benemérita y que han supuesto un esfuerzo para las arcas del Consistorio.

La valoración de ambos inmuebles trae consigo el posterior trámite administrativo para producir el cambio de titularidad del cuartel. Algo que el propio alcalde del municipio espera que sirva para zanjar una cuestión «que tanto tiempo lleva en la agenda política y que tanto preocupa a la ciudadanía» y que además, «supondrá un cambio en la fisonomía del barrio en el que se enclava el edificio y hacer una obra en el viejo que generará alguna actividad complementaria que valoraremos positivamente», dijo.

El edificio que acogerá al nuevo cuartel de la Guardia Civil en Puente Genil sigue sin estar habitado después de más de una década de obras y de una dotación de partidas presupuestarias procedentes del Ayuntamiento para reparar los daños provocados por actos vandálicos y robos, así como para equiparlo de ascensores y una climatización completa. En la actualidad una empresa privada de vigilancia está contratada por el Ayuntamiento para velar por la seguridad y la integridad de todos los elementos que contiene el inmueble, además de evitar la repetición de los episodios incívicos, como los robos.