La Consejería de Agricultura, Pesca y Desarrollo Rural de la Junta ha abierto un expediente sancionador a la empresa Dasy por un almacenamiento de harinas sin autorización en Santaella, según informó ayer la delegada de la Junta, Isabel Ambrosio. Este almacén fue detectado por los servicios técnicos de la Consejería en el marco de las actuaciones de los planes de control que se llevan a cabo de forma rutinaria. En el mismo había almacenadas 642 toneladas de harina categoría C1 (no apta para el consumo animal). Ambrosio ha indicado que en estos momentos dicha mercancía se encuentra inmovilizada y a la espera de ser incinerada.

Esta actuación se ha producido después que el pasado día 5 la consejera de Agricultura, Pesca y Desarrollo Rural, Elena Víboras, anunciase que ha ofrecido colaboración al Juzgado de Primera Instancia e Instrucción número uno de Osuna (Sevilla) en la investigación que ha abierto para determinar si empresas autorizadas para incinerar cadáveres de animales enfermos o no aptos para el consumo humano han usado esa carne y sus productos para elaborar harinas cárnicas para piensos destinados a animales de compañía.

Víboras confirmó entonces tener conocimiento de que efectivos del Servicio de Protección de la Naturaleza (Seprona) de la Guardia Civil habían inspeccionado ya diversas plantas de procesamiento de subproductos cárnicos no destinados al consumo humano en Extremadura, Cataluña y Andalucía. En este último caso Dasy, ubicada en Osuna, y la planta de tratamiento de subproductos cárnicos de Render Grasas en Salteras (Sevilla).

Más allá de confirmar que tenía conocimiento de estas inspecciones y de la investigación judicial abierta, que pretende averiguar si también se han usado animales enfermos o no aptos para el consumo humano para obtener grasas con las que se hacen piensos para pollos, vacas y cerdos, introduciéndose así en la cadena alimentaria humana, la consejera no quiso profundizar en este asunto "por respeto" a la actuación de la Guardia Civil y del juzgado sevillano.