La construcción de una nueva subestación eléctrica que garantice la dotación de suministro en Montilla recobra actualidad. La firma Endesa ha iniciado los trámites para la implantación de una infraestructura eléctrica en suelo no urbanizable que se ubicaría entre las subestaciones de Montilla y Espejo, en las proximidades del término municipal de Montemayor.
El proyecto, que se encuentra en una fase muy inicial, ha recibido ya el visto bueno de la Junta de Andalucía. No en vano, el delegado territorial de Agricultura, Pesca y Medio Ambiente, Francisco Zurera, rubricó a finales del pasado mes de marzo la aprobación inicial del expediente, a instancias de la propia compañía eléctrica.
La puesta en marcha de una nueva subestación por parte de Endesa es un proyecto largamente esperado por el Ayuntamiento de Montilla, ya que permitiría abastecer cerca de 720.000 metros cuadrados de suelo industrial repartidos en tres zonas de la localidad: El Cigarral, Jarata II y Las Canteras de Santa María. De igual modo, los planes residenciales pendientes de ejecución en las Laderas de San Agustín, La Retamosa y en la zona noroeste del término municipal dependen en gran medida de esta nueva infraestructura que permitiría solventar los problemas de abastecimiento de la localidad, que en la actualidad cuenta con una sola planta transformadora en la circunvalación de la carretera N-331, junto al hotel Alfar.
En febrero del 2007, el Ayuntamiento y Endesa alcanzaron un acuerdo para implantar una nueva subestación en el paraje de Los Hilillos, en el entorno de Los Picos del Cigarral, sobre una parcela de propiedad municipal de 3.400 metros cuadrados.
El Consistorio, gobernado entonces por IU, cifró el coste total de la infraestructura en torno a los 8,2 millones de euros, cantidad que debía ser sufragada por las unidades residenciales o industriales interesadas en contar con suministro eléctrico.
Aunque la intención manifestada hace siete años por el Ayuntamiento era que la nueva subestación se integrara en un plan de infraestructuras eléctricas amparado por el propio Plan General de Ordenación Urbana (PGOU), el proyecto quedó paralizado.
El actual alcalde, Federico Cabello de Alba, ha reconocido en varias ocasiones que el desarrollo del nuevo polígono industrial del Cigarral está "supeditado" a la implantación de una nueva infraestructura eléctrica, ya que la localidad no cuenta con potencia suficiente para abastecer las industrias que eventualmente pudieran instalarse en esta finca de propiedad municipal, de unos 400.000 metros cuadrados, situada junto al trazado de la carretera de Cabra.
