Media docena de autónomos y pequeños empresarios cordobeses del sector agrícola ha sufrido en los últimos meses robos selectivos de piezas de maquinaria pesada y así lo han denunciado. Sospechan que se trata de robos por encargo de bandas organizadas pues en todos ellos se ha utilizado el mismo modus operandi : han entrado de noche en el recinto donde estaban estacionadas, han extraído con precisión bombas y motores de las máquinas y las han sacado en un carrito, ya que el peso de estas piezas suele ser de más de 100 kilos. Las pérdidas que acarrean estos robos son inasumibles para muchos de ellos.

José Galán, de Montemayor, presentó denuncia el 26 de marzo en el puesto de la Guardia Civil en La Carlota. De su retroexcavadora Caterpillar, guardada en una nave paralela a la Autovía de Andalucía en Los Algarbes, se llevaron la bomba hidráulica y dos motores de traslación "con mucha precisión; eran mecánicos profesionales que no rompieron ni un manguito", asegura a este diario. Este robo le va a suponer "echarme al paro, porque no puedo pagar lo que vale". Estas piezas cuestan nuevas "más IVA y mano de obra, unos 30.000 euros, hay que pedirlas a Estados Unidos y esperar dos o tres meses".

Este autónomo apunta que "en la chatarrería me dan 4.000 euros por ella y a mí me costó cerca de 100.000" y añade que "mi fallo fue acudir a internet" y ofrecer los servicios de la maquinaria, que desde la crisis del ladrillo la empleaba para el arranque de olivos. Para este robo rompieron la valla metálica y "sabían a lo que iban, son profesionales de la mecánica que no dejaron ni una huella y están organizados".

De forma muy similar actuaron con una máquina propiedad de la familia castreña Marín. "Lo hicieron de noche y sacaron una bomba de tres millones de pesetas (18.000 euros) en un carrito sin romper ni un latiguillo", dice Antonio Marín. Este robo, producido hace dos meses y denunciado a la Guardia Civil, le ha obligado "a colocar una alarma". Sospecha de unos magrebíes "que vinieron a preguntar por la máquina sin estar siquiera en venta". Su hijo señala que "utilizaron un carrito de mano porque eso pesa 200 kilos".

TAMBIEN EN JAEN Parecido relato hace José Miguel Marín, de La Carlota. Sustituir la pieza que le robaron cuesta 11.000 euros y al igual que los anteriores afirma que "esto lo hicieron por encargo". Asegura conocer en Jaén "a otros que les ha pasado lo mismo".

Varios de estos afectados, a los que se suman pequeños empresarios de las localidades de Baena, Priego de Córdoba y Bujalance que denunciaron hechos con apenas variaciones, han acudido a establecimientos de venta de segunda mano, "pero ahí no tienen piezas como esas", destaca Galán, quien reclama a "las autoridades que tomen cartas en el asunto porque esto se ha ido de las manos".

También han contactado con los concesionarios para saber "si alguien había preguntado lo que valían las piezas, pero tampoco". Todo ello les lleva a pensar que estos motores y bombas "acaban en el extranjero".