Una trabajadora de la gasolinera de La Carlota (Córdoba), cuyo franquiciado ha despedido a otras compañeras por haberse negado a ponerse una falda y un polo con escote, ha defendido que va "a gusto" con la indumentaria por el calor y porque además lleva mallas debajo.

Así lo ha declarado a los periodistas en la estación de servicio Aservi de esta localidad cordobesa, a los que ha manifestado que no le parece una ropa sexista "porque no es una minifalda. Llevamos mallas debajo y no se nos ve nada cuando nos agachamos".

Por su parte Joaquín Cano, que es delegado sindical de la sección de técnicos sanitarios del CSIC, ha explicado a Efe que vio cómo despedían el pasado martes a cuatro empleadas de la gasolinera, menores de 30 años y vecinas de La Carlota.

"Estaba con mi mujer cuando cuatro trabajadoras se nos acercaron llorando diciendo que las habían despedido por no querer ponerse una camisa con escote, una falda y tacones", ha relatado.

El matrimonio, que intentó calmar a las jóvenes, fue echado del bar de la gasolinera por el responsable del surtidor, lo que no evitó que asesoraran a las jóvenes y pusieran el caso en conocimiento del sindicato.

"Es una barbaridad que ocurran estas cosas", ha lamentado Cano.

La coordinadora del Instituto Andaluz de la Mujer (IAM) de Córdoba, Ana Díaz, ha informado de que la Junta "está estudiando el caso" y ha puesto a disposición de las trabajadoras "todos los recursos para que se esclarezcan los hechos y se tomen las medidas necesarias para garantizar sus derechos laborales".

Por su parte, desde CCOO de Córdoba han señalado a Efe que la reunión con las empleadas prevista para esta tarde se ha suspendido por el miedo de las mujeres ante la repercusión mediática que está teniendo la situación, y que se sienten asustadas.

Desde el perfil social de la gasolinera, "La Carlota Aservi", se ha enviado un mensaje privado al sindicalista testigo del despido advirtiéndole de posibles consecuencias si no retiraba la denuncia sobre los hechos que expuso en un comentario.

El surtidor cuenta con la imagen de marca de la red de gasolineras estatal AVIA, que ha confirmado a Efe que el uniforme que marca el libro de estilo de la marca para todos los franquiciados es un polo rojo, un pantalón gris y unas botas, desde el surtidor no quieren facilitar la identidad de los franquiciados.

Según fuentes vecinales consultadas por Efe, podría tratarse de un empresario relacionado con negocios de un club de alterne cercano a la gasolinera, si bien otras fuentes indican que los franquiciados son empresarios de Madrid.