Después de catorce años copando espacio en los medios de comunicación y en las conversaciones de los vecinos, el nuevo cuartel de la Guardia Civil de Puente Genil parece encarar su recta final de forma definitiva. La instalación del transformador que va a dotar de energía eléctrica el edificio ya ha sido efectuada por Endesa, por lo que una vez cumplimentado este trámite, el traslado del cuerpo de agentes podría realizarse una vez concluya el procedimiento administrativo y jurídico abierto en estos momentos para cerrar la permuta del edificio situado en el polígono industrial Las Flores y el de la calle Miguel Romero.

La construcción del equipamiento en el que se deposite el transformador que aportará energía eléctrica al futuro nuevo cuartel de la Benemérita era un requisito indispensable para formalizar la permuta, ya que el promotor de la construcción no concluyó los trabajos de conexión con la red. Fue el propio alcalde de Puente Genil, Esteban Morales, el que en un pleno del pasado año reconoció que se dieron cuenta de la ausencia de la infraestructura válida para el sistema de electricidad en el entorno del inmueble.

La pregunta que se hace ahora la ciudadanía es, aparte de si se dará verdadero cumplimiento al traslado de agentes para el 2018 después de tantos años de espera, cuándo se producirá la inauguración del nuevo edificio. En este sentido, es muy probable que tenga lugar tras el verano, ya que la página web del Ministerio de Defensa recoge la celebración de un acto de jura de bandera de personal civil en el municipio para el sábado 20 de octubre.

De esta manera, la luz al final del túnel empieza a vislumbrarse después de un largo proceso en el que se fueron destapando varias irregularidades. Pudo concluir en el 2013, pero se detectó que el nuevo edificio no reunía los requisitos adecuados para la permuta definitiva y, un año después, el Ayuntamiento liberó 125.000 euros del presupuesto para dotar de ascensores las viviendas y de climatización las oficinas. Una vez completadas estas peticiones de la Giese, la colocación del transformador hace pensar que a esta historia le quedan pocas páginas para su final.