El proyecto Life que ha impulsado la Consejería de Medio Ambiente para conservar las dehesas andaluzas con el respaldo de diversos agentes públicos y privados, entre los que se incluye la Universidad de Córdoba, intervendrá en 14 fincas situadas en Córdoba de las 42 previstas en Andalucía. Los equipos de asesoramiento de los distintos equipos se encuentran redactando en la actualidad los planes de gestión integral de las fincas con las distintas acciones de conservación que se ejecutarán. En estas explotaciones se incluirán nuevos instrumentos de gestión diseñados para la dehesa y se comenzará a desarrollar el servicio de diagnóstico de la seca y los servicios de asesoramiento a la explotación.
Este proyecto Life, que cuenta con el apoyo de la Unión Europea, invertirá 7,9 millones de euros para promover la gestión sostenible e integral de las dehesas y mejorar su biodiversidad a través de la divulgación de actuaciones que aborden los retos de estos ecosistemas, así como el impulso de los instrumentos de gestión previstos en la ley para la dehesa. La Consejería de Medio Ambiente busca con estas iniciativas fortalecer estas zonas de gran riqueza ambiental ante el progresivo deterioro provocado por su envejecimiento y su vulnerabilidad ante el cambio climático. Además, pretende difundir que es posible desarrollar una gestión integrada y respetuosa con la biodiversidad.
La dehesa es un ecosistema que ha sido modelado por la intervención del hombre, que ha buscado aprovechar su riqueza y promover actividades selvícolas, pero también agroganaderas. Su conservación actual no se entiende sin esta explotación económica que ha permitido también una gran diversidad de la flora y fauna. En la dehesa se localizan en torno a 60 especies de aves nidificantes, más de 20 de mamíferos y otras tantas de reptiles y anfibios. Además, algunas de las especies que se encuentran más amenazadas, como sucede con el lince ibérico, el águila imperial, la avutarda, el buitre negro o la grulla, tienen en la dehesa su emplazamiento. Las dehesas de España se localizan en el sur y en el oeste del país, extendiéndose sobre una amplia franja que va desde Salamanca a Sierra Morena, Andalucía occidental y otras áreas castellanas y Madrid. La superficie adehesada en Andalucía se concentra en la mitad occidental en provincias de Huelva, Sevilla, Córdoba, norte de Jaén y en las sierras de Cádiz y de Ronda.
Precisamente, la dehesa andaluza está protegida como Reserva de la Biosfera por la Unesco tras declararse en noviembre del 2002 una superficie que se extiende sobre 424.400 hectáreas por las provincias de Córdoba, Huelva y Sevilla.
La Junta, con el respaldo de las distintas instituciones y entidades que participan en el programa Life, emprendieron este proyecto que se extenderá hasta el año 2017 tras el abandono de ciertas labores y la intensificación de otras que estaban produciendo una preocupación creciente en el mantenimiento de su diversidad biológica.
La experiencia adquirida en los últimos años a través de las actuaciones con propietarios en el marco de los programas de conservación de especies amenazadas (lince, águila imperial, buitre negro, etcétera) refleja que es posible convertir a las dehesas en espacios más idóneos para la fauna y la flora.
El enriquecimiento de la vegetación leñosa a través de la plantación o protección de árboles y arbustos y la creación de setos, la construcción de majanos o entaramados con restos de poda para facilitar la reproducción del conejo, la siembra y mejora de pastizales para mejorar la oferta existente, la adecuación de bebederos o los acotamientos puntuales son ejemplos de buenas prácticas que se intensificarán en estos ecosistemas.
