La Comisión Provincial de Flujos Migratorios de Córdoba ha analizado la campaña agrícola 2017-18, ya concluida, en la que, entre septiembre y marzo se contabilizaron un total de 182.818 contratos, mientras que las jornadas reales se situaron en 2.487.873, mientras que los datos de paro a fin de campaña constatan un descenso del desempleo del 10,75 por ciento en el sector agrícola.

Según ha informado la Subdelegación del Gobierno, donde se ha celebrado la reunión de la comisión, presidida por el subdelegado, Juan José Primo Jurado, también se ha hecho una valoración positiva de la implantación de la Guía Conduce, un documento que deben portar los transportistas de fruto durante la campaña, a fin de acreditar tanto el origen como el destino de la carga, «para evitar así posibles fraudes».

En la Comisión de Flujos Migratorios, a la que han asistido representantes de la Inspección de Trabajo, del Servicio Público de Empleo Estatal (SEPE), del Servicio Andaluz de Empleo y de organizaciones sindicales y empresariales, se ha acordado, respecto al contingente, «colaborar de manera intensa en el impulso del empleo en el sector». También se ha hecho una previsión de mano de obra de cara a la celebración de la próxima campaña, que se prevé un 20% superior a la actual, «salvaguardando que la contratación en origen no vaya en detrimento del mercado laboral de la provincia», según ha precisado la jefa de Trabajo e Inmigración de la Subdelegación, Marta Núñez.

La Comisión de Flujos Migratorios tiene como objetivo analizar la coordinación de los distintos organismos implicados en los flujos migratorios laborales en campañas agrícolas de temporada, especialmente en cultivos como el olivo y, en menor medida, el ajo y los cítricos, así como para valorar la situación real de la demanda laboral en Córdoba.