El Aula de Viticultura del Consejo Regulador de la Denominación de Origen Protegida (DOP) Montilla-Moriles volvió a alertar ayer de las primeras manchas de mildiu en viñedos del marco vitivinícola cordobés. Según detalló la Agrupación para el Tratamiento Integrado en Agricultura (Atria), los primeros síntomas de esta epidemia vegetal --que afecta a las viñas especialmente durante la primavera-- se detectaron el pasado 27 de abril en la Sierra de Montilla y, un día más tarde, en la zona de Las Arenas, en La Rambla. A su vez, durante el pasado fin de semana se han localizado nuevos focos del hongo en Montemayor, Aguilar de la Frontera y La Rambla.

"Estas manchas proceden de las lluvias de la primera quincena de abril, en viñedos que en esos días tenían pámpanos de más de 10 centímetros", explicaron los responsables del Aula de Viticultura, quienes hicieron hincapié en que si observa una mancha de mildiu en viñedo, "es importante no arrancar la hoja de la cepa" y avisar a las cooperativas o al Servicio de Sanidad Vegetal.

Conocido en otras regiones como "añublo" o "mildeo", este hongo parásito originario de América puede ocasionar daños devastadores en todos los órganos de la vid si el clima le favorece. De hecho, representa una de las enfermedades criptogámicas más peligrosas y de las más temidas por los viticultores porque, cuando la infección es grande, puede devastar toda la producción de una zona vitivinícola.

Una vez que se detecta la primera mancha, el Aula de Viticultura da la voz de alarma y los agricultores empiezan a aplicar los tratamientos correspondientes, a base de productos penetrantes y sistémicos.