El juzgado de instrucción número 1 de Posadas ha citado para hoy a la pareja que rivaliza por sus hijos, después de que el padre se los llevara el pasado día 25 de julio a Montilla desde Posadas, sin cumplir el compromiso de devolverlos esa misma tarde.

Ambos cónyuges están citados a las diez de la mañana para declarar sobre todas las acusaciones que ha vertido la madre sobre su marido. El padre de los pequeños deberá declarar en calidad de investigado sobre la no devolución de los niños el pasado día 25, así como todas las denuncias presentadas por la madre, como el documento que le entregó en el que le indicaba las condiciones de la relación, utilizando términos tales como «macho alfa».

Por otro lado, la joven presentó ayer una nueva denuncia ante la Guardia Civil de Palma del Río, por un hecho ocurrido por la mañana, en relación con un encuentro previsto para la entrega de los menores. La madre ha denunciado que la propuesta que recibió fue hecha por un agente de la Guardia Civil y, según señalan, se pretendía que de nuevo fuera el padre el que impusiera las condiciones de la entrega.

Sin embargo, el entorno del padre de los menores explicó que ayer el marido fue citado por la Guardia Civil de Montilla para que llevara a los niños. El encuentro con un agente de paisano se produjo en un bar cercano al cuartel, donde el guardia le planteó una serie de preguntas sobre el asunto y le tomó nota de los mensajes telefónicos en los que, al parecer, el marido ofrecía a la joven un encuentro para acordar las visitas.

Además, indican las mismas fuentes, se llamó a la madre de los niños para que acudiera a Montilla a recogerlos, con la condición de que los devolviera el próximo martes día 15 y hasta el 30 de agosto porque, según esta parte, existía un acuerdo previo para que en verano cada progenitor estuviera con los niños una quincena. Las condiciones no fueron aceptadas por la madre, que no acudió al encuentro y consultó con su abogado, además de proceder a presentar la denuncia.

Al no haberse producido ayer el encuentro entre los padres, los menores regresaron a la casa de sus abuelos en Montilla, que es donde están residiendo desde que se inició el conflicto.