LUGAR DE NACIMIENTO VILLANUEVA DE CORDOBA (1951).

TRAYECTORIA CATEDRATICO DE ANALISIS GEOGRAFICO REGIONAL, ES PROFESOR DE GEOGRAFIA Y CIENCIAS DEL TERRITORO EN LA UCO.

Tanto por especialidad docente, es catedrático de Análisis Geográfico Regional, como por haber nacido en Villanueva de Córdoba y sentirse muy enraizado en Los Pedroches, Bartolomé Valle Buenestado es uno de los mayores conocedores del paisaje de esa comarca y del mundo rural de la provincia en general, al que ha dedicado una profunda labor de investigación.

Profesor del Departamento de Geografía y Ciencias del Territorio de la UCO, académico y humanista de variados saberes y pasiones, acaba de ser nombrado presidente del Parque Natural de las Sierras de Cardeña y Montoro. Un territorio cuyas claves domina, lo que no quita entusiasmo a sus retos. "Sí, el terreno me resulta muy conocido profesionalmente y como espacio vivencial porque tengo vínculos personales que me acercan a ese territorio --afirma--. Yo nací en sus cercanías y uno de los paisajes de mi infancia es la dehesa".

--Así que su nombramiento más que al azar institucional se debe a una especie de selección de la especie , ¿no?

--(Ríe). La verdad es que una de mis líneas de investigación han sido Los Pedroches y tengo hechas muchas publicaciones sobre la dehesa, sobre desarrollo sostenible y espacios protegidos. Yo formaba parte de la junta rectora del parque desde hace varios años, y esta tuvo a bien proponerme el cargo cuando su anterior presidente, Manuel Torralbo --que ha hecho una labor excelente-- lo dejó al ser nombrado director general de Universidades de la Junta de Andalucía.

--También preside desde el año 2009 el Observatorio de la Agenda 21 de la provincia. ¿Son ambas responsabilidades compatibles?

--Son temáticas afines. El Observatorio de la Agenda 21 es un proyecto de la Diputación cuya finalidad es velar por la sostenibilidad en los municipios, lo mismo que hace la junta rectora del parque Cardeña y Montoro en un ámbito preciso. En ambos casos se trata de cuidar la sostenibilidad ambiental, la social y la económica. Porque no se puede aspirar solo a un conservacionismo del medio ambiente y no tener en cuenta que la protección tiene que ir en armonía con las poblaciones y las posibilidades económicas del desarrollo rural.

--¿Cuál será su cometido?

--En la junta rectora están integrados representantes de las administraciones, universidad, vecinos... Nos reunimos cada dos meses para velar por el cumplimiento de las normas del espacio protegido, promover el conocimiento de sus valores, facilitar la participación de los habitantes e impulsar la coordinación de los sectores público y privado, que es importantísima. Y dentro de esas funciones el presidente actúa como moderador y ejecutor de los acuerdos.

--¿Qué hay que hacer para optimizar los recursos del espacio con la mayor riqueza en biodiversidad de la provincia?

--Hoy se habla más de bienes de uso que de recursos. El bien se usa, mientras que el recurso se consume. La red de espacios protegidos andaluces es una auténtica joya y su declaración en 1989 supuso una intervención valiente de la Junta puesto que se echó adelante protegiendo casi un millón y medio de hectáreas. Pero no siempre contó con la satisfacción de los municipios afectados. Hoy la población se ha dado cuenta de que el territorio es uno de los mayores activos para el desarrollo rural, y nuestro objetivo es reforzar los vínculos antropológicos que atan a la población con el territorio.

Los nombramientos y distinciones se le acumulan últimamente a este profesor de discurso didáctico y parsimonioso, quien desde el pasado mes de septiembre es cronista oficial de Villanueva de Córdoba junto con Joaquín Criado, director de la Academia, que ya lo era antes. "Ha sido un honor que agradezco extraordinariamente a mi pueblo --reconoce--. La entrega del título, a la que asistieron mi padre y mi maestro de primeras letras, fue un acto muy emotivo para mí".

--Según parece va a haber seis paradas diarias del AVE en Villanueva de Córdoba. Como jarote de pro estará contento.

--Sí, yo soy de las personas que han tenido mucha fe en el AVE. Técnicamente estaba estudiado desde que la larga distancia se empezó a proyectar, pero surgieron las desavenencias políticas, hasta que se ha impuesto la razón. Algunos han dudado si sería rentable, pero la rentabilidad no es solo económica, tiene que ser también ambiental, social y territorial. No puedes ver hundirse una comarca en el subdesarrollo sin luchar contra el desequilibrio territorial. No todo puede ser vulgar calderilla.

--Fue el creador de la primera Cátedra de Taurología de España. Sí que llevó lejos su afición a la fiesta nacional.

--Creo que el mundo de los toros es un ingrediente fundamental de nuestra cultura. Tienen proyección artística, literaria, histórica, urbanística... Por ejemplo, no se puede explicar la morfología urbana de este país sin considerar las plazas de toros, al igual que las iglesias. Planteamos desde un punto de vista cultural muy amplio, con independencia de la lidia, la creación de la cátedra, que sigue siendo única en España. Y la Universidad de Córdoba fue sensible a la idea y la aceptó.

--En su biografía de internet se cuenta que quiso ser torero. ¿Es eso cierto?

--No, fui muy aficionado. Pero eso de ser torero son palabras mayores.

--Aun así, es usted una caja de sorpresas, porque también escribe estudios sociológicos sobre fútbol, y hasta pilota avionetas. ¿La tiene en propiedad?

--No, ya me gustaría, la alquilo. Y la verdad es que me lo paso en grande. Como decía Leonardo Da Vinci, el sueño de todo ser humano es volar, parecerse a los pájaros. Además disfruto mucho por mi condición profesional de geógrafo; es tener un punto de vista nuevo para la contemplación de la morfología agraria, de los planos, de las ciudades. Así que disfruto doblemente, tanto por el placer de volar como por el de comprender lo que veo desde el aire.