El alcalde de Cabra, Fernando Priego (PP), insistió ayer en que la gestión del equipo de gobierno municipal ha permitido superar la complicada situación que se encontraron en las arcas municipales tras el gobierno del PSOE e IU, situación a la que calificó de "endiablada, un ayuntamiento prácticamente en quiebra".

Priego junto al primer teniente de alcalde Javier Ariza (PA) y la delegada municipal de Hacienda, Ana Peña (PP), explicó que con el millón de euros de superávit con el que se cerró el ejercicio del año 2014, la deuda del consistorio egabrense con los bancos, la llamada deuda viva, se ha reducido en unos 2 millones de euros al pasar de los algo más de 6 millones de euros que se contabilizaban en el 2011 a 4.546.162,90 euros registrados a finales del pasado 2014.

Unos datos a los que habrá que sumar para finales del presente año la reducción que también se prevé de esa deuda en 1 millón de euros más, lo que supondría en cuatro años se rebaje a la mitad, lo que permitirá poder seguir con la inversión pública en actuaciones que propicien la generación de riqueza y empleo.

Respecto al presupuesto del pasado año, explicaban que éste se sitúa en un nivel de ejecución del 80% y entre otros datos indicaban que entre las previsiones para el presente 2015 se prevé de igual forma el ahorro de unos 200.000 euros en gasto por suministro eléctrico y otros 200.000 en concepto de intereses a abonar a los bancos. Reducción que de igual forma en estos años se ha dado en el pago de facturas a proveedores pasando de los 18 meses del 2011 a los 27 días en la actualidad.

Por último, volvían a incidir en que se han mantenido por parte de los populares y andalucistas, socios en el gobierno, las dos líneas rojas fijadas, como son la no reducción de aquellos recursos destinados a políticas sociales ni tampoco los destinados a políticas de empleo y desarrollo económico, que se han visto incrementadas y que en el caso de las últimas, duplicadas.