La concejala de Hacienda del Ayuntamiento de Lucena, Araceli Bergillos, ha informado sobre las cifras del cierre presupuestario municipal del año 2017, una liquidación que arroja un superávit de 2,3 millones de euros y un remanente de tesorería positivo de 961.672 euros.

El informe elaborado por la Concejalía de Hacienda fija en un 89,6% la ejecución del capítulo de gastos del presupuesto del último ejercicio, con partidas como la de servicios y gastos corrientes o personal, rondando el 95%, mientras que la de inversiones arrojaba a 31 de diciembre un 51% ejecutado, si bien «esa cantidad, que puede parecer baja -ha matizado la concejala- se corresponde con inversiones que se van completando en los primeros meses del año 2018 porque son obras y actuaciones importantes, como la intervención en la zona del río con nuevos colectores, que trascienden de la liquidación del presupuesto y que se materializan en dos años diferentes pero con cargo a un único presupuesto».

En cuanto al capítulo de ingresos, Bergillos ha señalado que la liquidación del año 2017 viene marcada por la revisión catastral llevada a cabo durante el pasado año, lo que ha arrojado un total de 1,8 millones de euros de exceso sobre las previsiones incluyendo tanto el IBI de naturaleza urbana como el rústico. En total, el Consistorio lucentino reconoció derechos por importe de 44,8 millones de euros sobre un presupuesto inicial aprobado de 39,2 millones.

Respecto al capítulo de deuda, el Ayuntamiento mantiene una deuda viva con las entidades financieras a fecha de 31 de diciembre, de 13,4 millones de euros, cantidad que se vio mermada durante el pasado año tras comenzar en poco más de 15 millones. Con esta cifra de deuda, Araceli Bergillos ha fijado el nivel de endeudamiento de la institución en un 36,36%, lejos del 110% que establece como máximo la ley, de modo que «el Ayuntamiento está en condiciones de acudir a crédito si lo estima oportuno para desarrollar diferentes actuaciones o servicios».

Para invertir el superávit, Bergillos ha informado que en estos momentos el Ayuntamientos está a la espera de que el Ministerio de Hacienda concrete el uso que se puede hacer tanto del superávit como del remanente de tesorería. «El ministro Montoro ha anunciado cierta flexibilización tras negociar con la FEMP, pero hasta que no conozcamos el decreto ley no detallaremos cuánto dinero y en qué inversiones podremos emplearlo».

La concejala ha adelantado que, a falta de conocer los detalles, el gobierno ya trabaja en un plan que se deberá consensuar con el resto de grupos. Así, ha avanzado que se propondrán nuevas inversiones en Casa Tejada, adaptar el CEIP Nuestra Señora de Araceli para la construcción del comedor, crear nuevos espacios verdes o la nueva EDAR para reutilizar el agua depurada para el riego de jardines.