Los Servicios Sociales en Puente Genil amplían este año con 20.000 euros más el capítulo de suminitros vitales básicos (para hacer frente así al pago de la luz, agua, alquiler o gas), llegando a los 40.000 euros de presupuesto en este sentido. Y es que continúa aumentando la atención a las personas que atraviesan serias dificultades económicas -el pasado año se atendió a un 10 por ciento de la población-. Según indicó la concejala del ramo, Pepa Ramos, «esto es posible gracias al aumento de un 25 por ciento más en la partida de los Servicios Sociales». En este sentido, también puso de manifiesto que el Programa de Ayuda Familiar (PAF), para personas de larga duración en desempleo verá modificados sus criterios de acceso durante este año con el objetivo de beneficiar a más usuarios. De esta forma, a lo largo de este año se verán beneficiadas las personas mayores de 40 años, con una vida laboral de más de 15 años y fuera de la entidad local. «Hasta tres meses podrán acceder dichos usuarios a las ayudas del PAF en lugar de un mes», según indicó la edil.

Por otra parte, los jóvenes con cargas familiares podrán acceder hasta los dos meses de trabajo con los nuevos criterios del PAF, ya que «en lugar de analizarse los criterios económicos de toda la unidad familiar, se focalizarán en ellos los recursos». De igual modo, «se dará una primera oportunidad a los jóvenes formados con un mes de acceso laboral», según apuntó Ramos.

Este programa pondrá especial énfasis en los programas de formación, por lo que el PAF estará muy ligado a talleres formativos, prelaborales y de prevención, así como a un informe de rendimiento laboral. «Se va a valorar la cronicidad del solicitante en los Servicios Sociales y se va a estimar el comportamiento del trabajador, su actitud y las faltas injustificadas». Y es que, según Ramos, «los usuarios, además de contar con unos derechos, también están sujetos a cumplir con unas obligaciones».

En cuanto a las zonas de actuación, se intervendrá en las distintas barriadas de una forma mucho más directa ya que, según especificó la concejala, «en aquellas zonas con necesidad de una transformación social van a tener una presencia más completa tanto las trabajadoras sociales como las monitoras de barrio», además de llevarse a cabo un proyecto en conjunto con la empresa municipal Egemasa para que «se puedan arreglar las zonas comunes». Asimismo, «se contará por primera vez con una nueva partida de 17.000 euros para ofrecer apoyo escolar a aquellas familias que, con pocos recursos, no puedan contar en Infantil con el material necesario para arrancar el curso escolar».

Todo este trabajo se va a describir en un tríptico o catálogo de servicios adjuntados al historial de cada usuario de los Servicios Sociales «para un mayor control de los subsidios». Ya el pasado año se registraron, como datos provisionales, 666 usuarios de ayudas de emergencia social, 141 personas en ayudas municipales, 68 en ayuda familiar y unas 70 personas beneficiarias de los suministros vitales básicos.