En el año 2013 se cometieron numerosos robos en el olivar lucentino, como el que tuvo lugar a primeros del mes de marzo, cuando se produjo uno en el que sustrajeron unos doce mil kilos de este fruto.

El robo tuvo lugar hace casi un año en un olivar situado junto al polígono industrial Los Santos, en una finca de Pedro Servián. Según denunció en aquel momento el propietario, los ladrones no solo se llevaron la cosecha, sino que además se ensañaron con los olivos, algunos de los cuales quedaron parcialmente destruidos al ser apaleados con tal dureza que partieron ramas de un importante grosor y los dejaron en muchos casos sin hojas.

Muy al contrario de lo que venía ocurreindo en la mayoría de las ocasiones, cuando se buscaba un lugar alejado para asaltar los olivares, este robo se produjo no lejos del casco urbano y se sospecha que de nuevo esta actividad delictiva fue llevada a cabo por una banda organizada de ladrones.