Con el descubrimiento y la bendición de un azulejo conmemorativo, la Real Archicofradía de María Santísima de la Sierra, patrona de Cabra, conmemoraba el 40 aniversario del traslado de la imagen desde su santuario enclavado en el picacho egabrense al Archivo parroquial de la Asunción y Ángeles, lugar donde se acometió su restauración por el cordobés Miguel Arjona Navarro.

Un acto donde Antonio Cano y Fabián Guijarro, hermano mayor y secretario de la Real Archicofradía, respectivamente, junto al alcalde, Fernando Priego, y el consiliario y párroco de la Asunción y Ángeles, José Antonio Jiménez, recordaban la efeméride y la importancia que aquella labor tuvo para la conservación de la tan venerada imagen, ante un nutrido número de fieles entre los que se encontraban familiares y amigos del restaurador y miembros de la comisión gestora que en aquel momento estaba al frente de la Archicofradía.

Cano, además, anunció que entre los actos previstos para conmemorar esta efeméride se encuentran un besamanos que con carácter extraordinario tendrá lugar en su santuario los días 12 y 13 de mayo, fecha está última en la que se produjo la subida extraordinaria de la imagen tras su restauración en el año 1978. Además de una exposición alusiva a la restauración que podrá verse en el propio santuario, a la que se sumará una celebración eucarística y una vigilia con fecha aún por determinar. El trabajo de Arjona Navarro, fallecido en el año 2012, quedó vinculado a Cabra desde entonces ya que además su impronta quedó reflejada en varias obras de nueva talla.