La tasa mensual del Índice de Precios de Consumo (IPC) se ha situado en un 1,2% durante el pasado mes de octubre en Córdoba, debido a la influencia positiva de distintos grupos como el vestido (12,3%), la vivivienda (1,7%) y la alimentación y las bebidas no alcohólicas (1,4%), principalmente. De este modo, la información publicada ayer por el Instituto Nacional de Estadística pone de relieve la incidencia de la llegada de la temporada de invierno al sector de la moda y de las subidas de precios registradas en la electricidad y las frutas. Con este resultado, el IPC ha anotado en la provincia la variación mensual más importante del año.

De otro lado, la tasa anual de este índice se encuentra en el 1,7%, tres décimas por debajo de la registrada en septiembre. En este caso sobresalen por encima de otras subidas las contabilizadas en la vivienda y sus distintos conceptos (agua, electricidad, gas y otros combustibles) y la del ocio y la cultura, ambas con un 3,1%. En lo que va de año, el IPC arroja una evolución positiva del 0,7%, lo que podría representar un cambio de tendencia respecto a meses anteriores, en los que el acumulado ha sido negativo o muy bajo. En este apartado destacan la evolución de los precios de la enseñanza (2%), los restaurantes y hoteles, y los alimentos y bebidas no alcohólicas (1,9% en cada caso). Por otra parte, la tasa ha bajado en el vestido y el calzado (-3,3%) y también en los muebles y los artículos para el hogar (-0,7%).

Al hilo del crecimiento de los precios, el secretario de Empleo de CCOO de Córdoba, Manuel Merino, insistió ayer en la necesidad de que «los salarios se incrementen lo suficiente para evitar el empobrecimiento de las familias». El sindicato también reclamó una «suficiente» revalorización de las pensiones y la derogación de la reforma del 2013.