En torno a una veintena de colegios concertados deberán recurrir a sorteo para aclarar la asignación de sus plazas en la etapa de segundo ciclo de Infantil de cara a la escolarización del próximo curso. Concluido el plazo de presentación de solicitudes, Escuelas Católicas y la Confederación Española de Centros de Enseñanza CECE informaron ayer sobre los datos registrados. De la treintena de centros que aglutina Escuelas Católicas, en 14 la demanda supera a la oferta de plazas, lo que refleja, según la patronal, que «pese a la bajada de natalidad sufrida nuestros centros vuelven a ser muy demandados por los padres, sobre todo, colegios como Virgen del Carmen, Trinitarios, Mercedarias, La Salle, Bética Mudarra o Cervantes». Desde Escuelas Católicas destacan además que «en los centros de la provincia, a pesar del brutal descenso de la natalidad registrado y de la competencia desleal de los centros públicos, que ofrecen comedor gratuito entre otros servicios, los datos también son muy esperanzadores para la escuela concertada». En la misma línea, fuentes de CECE, que no ofrece datos por centros, indicaron que «la escolarización está en torno al 80% de plazas ofertadas, aún cuando en algunos de los centros» (cinco o seis de la veintena que engloba la patronal, señalaron) «se augura que habrá que recurrir a las listas de espera». Asimismo, CECE denuncia que los centros de educación diferenciada que están adscritos a dicha patronal, entre ellos Zalima, «se sienten discriminados por no tener abierta la escolarización ni haberse pronunciado aún la Administración autonómica sobre las alegaciones formuladas en contra de la denegación de los conciertos educativos». Cabe recordar que el pasado 31 de marzo se cerró el plazo para solicitar plaza en el segundo ciclo de Infantil, Primaria, Secundaria o Bachillerato y que este año, coincidiendo con la renovación de los conciertos educativos por parte de la Junta de Andalucía, la administración autonómica informó de su intención de no cerrar unidades escolares en ningún centro, ni público ni concertado, y de mantener los conciertos tal cual, sin que Córdoba se haya visto afectada por algún tipo de reducción de plazas. Los únicos centros afectados por la denegación de los conciertos educativos son aquellos que ofertan educación diferenciada. En Córdoba, esta medida afecta a Zalima, en la capital, Torrealba y Yucatal, en la provincia.