La federación de asociaciones vecinales de Córdoba Al-Zahara, una de las más relevantes del movimiento vecinal andaluz con sus 96 colectivos miembros, se ha fijado entre sus ocho objetivos del año 2017 reivindicar, consensuar y poner en marcha la revisión del Plan General de Ordenación Urbanística de Córdoba (PGOU), documento rector del desarrollo de la ciudad (y de todo recurso por el uso de su suelo) que se aprobó en el 2001, en plena explosión del sector de la construcción, y que, tras la crisis y al concluirse sus 12 años de desarrollo, no responde «a un nuevo modelo de ciudad», que se encuentra sin «documentos útiles para que no se tenga que ir de innovación en innovación», explica Antonio Toledano, presidente de la federación vecinal.

Para el presidente de Al-Zahara, que el pasado martes celebró la primera reunión del año de su permanente y que en la semana entrante tendrá una sesión de su directiva, la demanda de un nuevo PGOU, que ya no se base «en la construcción desaforada de viviendas» y que en cambio mejore «la ciudad consolidada, tanto en el núcleo central como en la periferia», es el primero de los objetivos del 2017, para lo cual, y como primera medida, pedirá que se reúnan lo antes posible las comisiones de seguimientos del PGOU y del Plan del Casco Histórico, todo ello tras seis años sin celebrar ninguna sesión.

VELADORES, PARCELAS e ite / En paralelo (ya que en la propuesta de un nuevo PGOU estarían presentes muchos de los otros objetivos de Al-Zahara), la federación vecinal se ha propuesto «seguir defendiendo la aplicación de la ordenanza existente interpretada según la posición común fijada en la Mesa de Veladores», dice Toledano respecto al debate sobre esta actividad, que se tratará el próximo día 10 en la Mesa de Veladores. Más aún, las asociaciones vecinales piden que también se cumpla la norma con los puestos de caracoles o comercios que ocupan la vía pública de forma desordenada y excesiva. «Defendemos la accesibilidad, la movilidad y la convivencia», resume Antonio Toledano.

La «lucha contra los desahucios y contra de la pobreza energética y falta de suministros básicos», para lo cual se seguirá colaborando con Stop Desahucios y se pedirá la implicación de todas las administraciones y «que cada mes se reúna la comisión mixta Servicios Sociales-Vimcorsa para las ayudas al alquiler», es otro de los objetivos del año, así como un nuevo plazo para presentar las inspecciones técnicas de edificios (ITE), con ayudas a familias que no pueden costearlas, y retomar los planes comprometidos para rehabilitar viviendas e instalar ascensores.

PROYECTOS SOCIALES / Más allá de cuestiones puramente urbanísticas y de vivienda, Al-Zahara fija entre sus objetivos del año «defender la existencia de recursos para el Plan Integral de Palmeras y aquellos otros que se pudieran definir en otras barriadas con índices altos de pobreza», además de dar prioridad en el capítulo de medioambiente a la ejecución de la red de parques que falta (Parque de Levante, Parque del Canal…) y «el mantenimiento adecuado de nuestras zonas verdes y espacios libres», afirma Toledano. Eso sí, Al-Zahara se ofrece a trabajar con Sadeco y Emacsa «en el incremento de la reducción de residuos, su reutilización y reciclaje a través de campañas ciudadanas». La oposición al Plan de la Sierra hasta que no se recojan «las aspiraciones del vecindario de la zona», revitalizar el entorno del río colaborando con plataformas e instituciones y «apoyar a la Plataforma por un Aire» son otros aspectos de los objetivos de Al-Zahara en medioambiente.

Otra línea de trabajo para el 2017 es la de aumentar la presencia y el peso de la mujer en todo el movimiento vecinal cordobés, para lo que se elaborará un plan transversal, informa Toledano.

Por último, el presidente de Al-Zahara cita entre los objetivos del año ayudar a que se regule la siempre conflictiva figura urbanística de suelos privados de uso público, que en las últimas décadas ha generado no pocos conflictos entre vecinos y con el Ayuntamiento, algo de lo que Ciudad Jardín o Parque Cruz Conde, entre otros barrios, son testigos.