La Gerencia de Urbanismo confía en sacar adelante mañana el informe de valoración sobre el impacto de la salud necesario en el proceso de innovación de PGOU que tramita para que las empresas que quieran valorizar residuos no peligrosos para su uso como combustible alternativo lo hagan en la Campiña y no en el casco urbano. Esa innovación tiene efectos directos en Cosmos, que cuando entre en vigor esa innovación no podrá valorizar en el lugar en el que está. Mañana será la segunda vez que el informe llega al consejo rector, ya que a primeros de septiembre quedó sobre la mesa a petición del PSOE, que pedía cambios, que fue respaldado por PP y Ciudadanos, lo que supuso un duro revés para IU.

El presidente de Urbanismo, Pedro García (IU), aseguraba ayer que desde entonces «ha habido un importante trabajo de coordinación técnica» con Salud y el documento responde «a la metodología que ha elaborado la Junta» y a la «realidad» del término municipal. Por su parte, la alcaldesa, Isabel Ambrosio (PSOE), afirmó que tras las reuniones celebradas, y «una vez resueltos los matices que echábamos en falta, continuará su trámite». Cuando se apruebe el documento, añade, «será la Junta, a través de Medio Ambiente y Salud, la que dé continuidad a la innovación que trata de ordenar la actividad de valorización de residuos en el término municipal de Córdoba».

Si no hay más sorpresas, el PSOE dará su apoyo al nuevo informe de salud, aunque sigue sin convencerle, por lo que propondrá modificaciones. Según las fuentes consultadas, el PSOE echa en falta datos que se han quitado y otros que siguen sin aparecer. Es más, dentro del grupo municipal tienen dudas de que el tipo de innovación, pormenorizada, que se impulsa sea la adecuada y que no haga falta una estructural, cuyo trámite es más largo. De todo esto se deduce que la innovación que se tramita puede deparar aún sorpresas.

El expediente de Planeamiento explica que tras la reunión del 22 de septiembre en la Dirección General de Salud, Urbanismo ha añadido al informe un apartado para facilitar la comprensión del fin de la innovación, un párrafo que alude a las industrias existentes, y un análisis de las zonas industriales y de su afección.

El nuevo informe de salud explica que la innovación, que tendrá impacto «positivo» en la salud, «no altera el catálogo de usos urbanísticos existente, ni las zonificaciones previstas, ni el régimen jurídico urbanístico de las instalaciones industriales implantadas anteriormente en desarrollo» del PGOU limitando la valorización a zonas alejadas del núcleo urbano.

Aunque el documento explica que si se acredita la ausencia de peligrosidad podría ser viable la implantación en zonas industriales de empresas que valoricen, incorpora una lista de 21 espacios con las afecciones que provocan para demostrar que son mayores que las que se producirían en la Campiña. El informe contabiliza 537.510 personas en el radio de acción de 2.000 metros de las zonas industriales existentes, 11 facultades, 6 hospitales, 7 equipamientos deportivos, 275 colegios, 24 centros de salud y 64 zonas verdes.