El presidente de la Gerencia de Urbanismo, Pedro García, se reunió ayer con comerciantes de la zona del casco histórico para abordar el conflicto generado en torno a la aplicación de la normativa de contaminación visual y acordó con los afectados, según explicó después su portavoz, Rafael Bados, crear una comisión para tratar en profundidad todos los problemas que afectan a estos comercios. Mientras se llega a un consenso sobre las medidas a adoptar, Urbanismo suspenderá la aplicación de la norma sobre contaminación visual. A la espera de conocer la versión de García, que hoy tiene previsto ofrecer una rueda de prensa sobre la reunión mantenida anoche, Bados adelantó que el concejal de Urbanismo «reconoció ante los presentes como un error el haber planteado públicamente la aplicación de estas medidas sin reunirse previamente con el sector». Los afectados se mostraron satisfechos porque la comisión que se creará en el mes de septiembre «no se ciña únicamente a la contaminacion visual» sino que abarcará otras cuestiones como la seguridad, el tráfico, la limpieza o la contaminación acústica que denuncian los comerciantes. Según Bados, se trata de una cuestión muy importante para la ciudad «que afecta a los más de 500 comercios que operan en el casco histórico». García retomaría así el camino planteado por la alcaldesa de Córdoba, Isabel Ambrosio, que lanzó un mensaje de calma al sector a raíz de la polémica asegurando que no se adoptarían medidas sin contar con el sector. Cabe recordar que la reunión de ayer tenía como principal objetivo cuando se convocó poner en conocimiento de los comerciantes los detalles sobre la aplicación de la norma, que había generado en las pasadas semanas el malestar del sector y la alarma ante la repercusión que pudiera tener su puesta en marcha para los comercios y para los empleos que dependen de éstos.H