En el 2007 ETA anunció el fin de su tregua y por consiguiente sus actuaciones. Tras este comunicado, provocaron daños colaterales a los usuarios del tren. Por este motivo, las consignas de todas las estaciones del territorio español pasaron a un segundo plano, hasta el punto de que muchas de ellas desaparecieron sin dejar rastro. Córdoba fue uno de esos espacios ferroviarios en los que este servicio se suprimió. No obstante, tras mucho esfuerzo ya podemos ver cómo la estación cordobesa posee un espacio dedicado al depósito de maletas.

Los usuarios que estaban de paso en la ciudad echaban de menos un recinto en el que dejar sus maletas durante su estancia, en ocasiones viajes de ida y vuelta o de solo un par de días.

Junto a una de las puertas de acceso lateral de la estación cordobesa se puede encontrar un espacio diseñado de una forma original. Con motivos internacionales presentados mediante murales expuestos en sus paredes, los responsables de la consigna quieren hacer de este lugar un espacio acogedor donde todos los viajeros se sientan como en casa. Con una capacidad de 85 plazas, esta consigna quiere recuperar el tiempo perdido y ofrecer a los visitantes un servicio deseado por muchos de los viajeros que pasan de forma habitual por la estación Córdoba Central.