La empresa Endesa ha reanudado el soterramiento de líneas de alta tensión en el aeropuerto, tarea pendiente en las instalaciones renovadas hace seis años y que se ha iniciado y parado en varias ocasiones. Los trabajos para soterrar las líneas eléctricas son imprescindibles para que la pista del aeropuerto pueda utilizarse para despegar y aterrizar indistintamente por una cabecera y otra. Hasta ahora, y desde el 2013, momento en el que AENA buscó una solución provisional hasta que las líneas estuviesen soterradas, el despegue se lleva a cabo por una cabecera y el aterrizaje, por la otra.

Fuentes de Endesa han explicado a este periódico que «se está trabajando en el tramo subterráneo de la línea de alta tensión, con la idea de ponerlo en servicio a finales de octubre si todo transcurre con normalidad y no hay imprevistos». Después de ese paso, y según las mismas fuentes, «se comenzará a desmontar el tramo aéreo que supone un obstáculo para el aeropuerto». Pero estos no son todos los trabajos pendientes. Endesa afirma que sigue a la espera de recibir licencia para «la instalación de la fibra óptica necesaria para el desmontaje del tramo aéreo y para la instalación del balizamiento de seguridad en los postes que se quedan cercanos al aeropuerto».

El soterramiento es una de las tareas pendientes en el aeropuerto, junto a la puesta en servicio del sistema AFIS, que está en proceso de instalación y que permitirá los vuelos comerciales, y al plan de márketing prometido por Fomento para sacarle partido a unas instalaciones ampliadas desde el 2011 tras una inversión de 85 millones.