La Sección Segunda de la Audiencia Provincial de Córdoba suspendió ayer el juicio a un hombre acusado de un delito continuado de violaciones a la hija de su pareja, que comenzaron cuando la niña tenía 13 años. Fuentes judiciales indicaron que la joven habría retirado la denuncia y que ayer no se presentó a la vista oral, motivo por el cual se decidió su suspensión. En este momento, es el Ministerio Fiscal quien mantiene la acusación, por lo que deberá fijarse una nueva fecha para la celebración del juicio. La Fiscalía solicita para el acusado penas de 14 años de cárcel y orden de alejamiento durante 18 años.

Al parecer, el acusado habría aprovechado la relación con la madre de la menor y su presencia en el mismo domicilio para acercarse a la niña «con ánimo libidinoso», llegando a violar a la víctima. El varón mantuvo su conducta entre el 2011 y el 2015, mostrándose cada vez más agresivo, hasta que la joven, ya con 17 años, huyó del domicilio familiar y se instaló con su padre.

Por otro lado, un abuelo acusado de abusos sexuales contra su nieta aceptó ayer los hechos ante el juez, que le impuso una condena de dos años de prisión y 2.600 euros de multa, así como la orden de no acercarse a la víctima durante 4 años. Según la calificación del Ministerio Fiscal, que solicitaba inicialmente 6 años de cárcel y orden de alejamiento durante 8, los hechos ocurrieron en agosto del 2012. Al parecer, el acusado aprovechaba que la niña estuviera en su casa para realizar los abusos.