Vecinos y Stop Desahucios reclamaron ayer una tregua energética invernal y que las administraciones garanticen los suministros a las familias más vulnerables. Denuncian que "España es el tercer país de Europa con la luz más cara y el cuarto con más personas en situación de pobreza energética" y que se estima que más de 2.300 personas mueren al año por esta causa. El sistema actual, según el manifiesto entregado a las administraciones, "penaliza el ahorro y ahoga a los pequeños consumidores, por lo que es necesario reducir al máximo el término fijo de la factura energética para que lo que paguen los usuarios dependa del consumo y no de peajes e impuestos".

La pobreza energética abarca a las familias que carecen de recursos y a las que cuentan con ingresos insuficientes para tener un mínimo de bienestar en su vivienda.