Un esfuerzo especial para acompañar a los más necesitados también en Nochebuena. Esta fue la labor realizada el jueves pasado en Córdoba por Cruz Roja, el comedor social de los trinitarios y la Casa de Acogida Madre del Redentor de Cáritas, que entregaron una comida con productos típicos de Navidad a decenas de personas sin techo y, en el caso de la casa, también las acogieron en sus instalaciones.

El voluntario de Cruz Roja Rafael Lama explicó ayer que el objetivo es tratar de hacer algo más agradables estas fiestas a los usuarios y detalló que habían atendido a cerca de 40 personas. Su trabajo comenzó a las 15.00 horas, con los preparativos en la sede, y después iniciaron una ruta de tres horas en la que las paradas más destacadas fueron la Iglesia de la Merced y las inmediaciones de entidades financieras en la avenida del Aeropuerto y en Gran Capitán. Los beneficiarios recibieron pan, paté, sardinas, melocotón en almíbar y unos dulces navideños. Lama explicó que Cruz Roja realiza sus salidas de forma habitual los martes, jueves y sábados, y al coincidir con Nochebuena y Nochevieja, seguirá haciéndolas aunque adelantando el horario. En cuanto a su experiencia, comentó que "te encuentras con el agradecimiento de que estas personas lo necesitan".

Por otro lado, el director del comedor social de los trinitarios, Eduardo García, señaló que el día 24 habían recibido a unas 60 personas y trabajaron con las familias que atienden mediante su convenio con el Ayuntamiento de Córdoba. García recordó que desde hace unos años, un grupo de antiguos alumnos del Colegio Cervantes adquiere la comida que ofrecen en Nochebuena. Los villancicos precedieron a un almuerzo con jamón, langostinos y queso, además de otros entremeses y un pastel vegetal, pavo en pepitoria y también dulces. En la Casa de Acogida Madre del Redentor de Cáritas, informaron de que habían contado con unas 44 personas para la cena y otras 20 que acudieron en el marco del programa de la ola de frío, que durmieron allí y tuvieron cena y desayuno.

Junto a estos recursos, los domingos se ponen en marcha los voluntarios de la Fundación Nur para cubrir el descanso de otras entidades. Su responsable en Córdoba, Rafael Rodríguez, recordó ayer que acuden a las inmediaciones de la estación de trenes, la plaza del Cristo de Gracia y también la lonja, y entregan una bolsa con bocadillos, fruta y otros alimentos como la sopa en invierno.