El Ministerio de Agricultura, a través del Fondo Español de Garantía Agraria, ha sacado a subasta esta mañana el Silo de Santa Cruz, que colectivos sociales de la barriada periférica han reclamado desde hace tiempo para uso ciudadano y para convertirse en un centro de interpretacion del yacimiento de Ategua. El adjudicatario ha resultado ser un empresario local, Empresa Agroalimentaria Sánchez S.L., por un precio de 435.000 euros, informa la Subdelegación del Gobierno de Córdoba. Asimismo se ha adjudicado a la empresa Pastas Gallo, por un millón de euros, el Silo de El Carpio.

En las últimas semanas, el primer teniente alcalde de Urbanismo, Pedro García, se ha puesto en contacto con el Fondo Español de Garantía Agraria para tratar de paralizar la subasta y se reunió en Madrid con el presidente de este organismo autónomo adscrito a Agricultura, que se comprometió a estudiar la posibilidad de frenar la subasta. Ayer mismo, García calificó de "desleal" la actitud del Gobierno central con Córdoba por este motivo, y puso como ejemplo de colaboración la cesión de suelos municipales para la construcción de dos comisaría en Córdoba. El Grupo Municipal Socialista en el Ayuntamiento de Córdoba reclamó también en noviembre al Gobierno de la Nación, a través de una moción que llevó al Pleno ordinario del 14 de noviembre, que el Ministerio de Agricultura y Pesca, Alimentación y Medio Ambiente paralizase el proceso de subasta pública del Silo, como paso necesario para "la cesión gratuita" del mismo al Consistorio con el fin de destinarlo a actividades culturales.

La Subdelegación del Gobierno, por su parte, ha defendido desde primera hora que en su momento ofreció el inmueble a las administraciones locales y que el único modo que había para que el Ayuntamiento lo adquiriese hubiese sido pujando. "La venta de estos inmuebles se realiza de acuerdo con lo establecido en la Ley de Patrimonio de las Administraciones Públicas y bajo las competencias que el FEGA tiene en materia de enajenación de bienes inmuebles de su patrimonio”, indicó Juan José Primo Jurado.

La patronal Asaja, por su parte, pidió en noviembre que tanto el Silo de Santa Cruz como el del Carpio conservaran su uso agrícola, ya que consideran que eso generaría empleo y actividad económica a la zona.