El general Lázaro Cárdenas del Río, recordado en un busto en la céntrica calle Córdoba de Veracruz, fue ayer el único protagonista de un sentido acto que culminó en una ofrenda floral. La Comunidad de Estudiantes Mexicanos en Córdoba coordinó el homenaje que tuvo como invitados de honor a Julio Anguita, el profesor Eduardo Sevilla y el concejal David Luque.

Aunque nadie hizo mención de la desafortunada anécdota que se produjo el 24 de octubre de 1994 (cuando se descubría el busto de otro ex presidente, Benito Juárez, en vez del de Cárdenas ante su hijo Cuauhtemoc), en las mentes de todos estaba este hecho de manera más o menos explícita.

GRANDEZA

Ayer 18 de marzo, casi nueve años después de aquel incidente , y con más seriedad, Córdoba se sumó a una celebración grande para los mexicanos, el 65 aniversario de la expropiación petrolera, que permitió crear en aquel país un patrimonio que fue la base de un gran desarrollo económico posterior.

En esa fecha el general hizo un llamamiento de apoyo para que sus ciudadanos lo apoyaran y decretó que las compañías de petróleo en manos de capital extranjero se nacionalizaban. A partir de ese punto el petróleo lo administró el estado mexicano para beneficio del pueblo.

Por ello, Córdoba hizo justicia con el dirigente de aquel país entre 1934 y 1940. El nacionalismo y la justicia social, el impulso al campo y el reparto de 18 millones de hectáreas de tierra cultivable (que dio lugar a una base social campesina muy fuerte) fueron las grandes bazas de su gestión como gobernante, tal y como recordó José Luis Pimentel, de la Comunidad de Estudiantes Mexicanos, en una semblanza del general.

IDEAS DE IZQUIERDA

La unión de este personaje histórico con la ciudad de Córdoba reside en la "veta histórica de la izquierda mexicana", para Pimentel. "Lázaro Cárdenas desarrolló políticas de izquierda y Córdoba tiene esa veta política importante. Entonces, ha habido un intercambio a través del pensamiento político". En el apartado de la política exterior, Cárdenas llevó a cabo la solidaridad y el respeto a la pluralidad con los distintos países y mostró su apoyo a las causas de la democracia y la libertad. "Abrió los brazos para que 20.000 republicanos españoles tuvieran en México su segunda patria" al concluir la guerra civil y lo cierto es que éstos también contribuyeron a fortalecer la ciencia, la cultura y la vida económica.

EL PETROLEO IRAQUI

Julio Anguita, que no dudó un instante en formar parte del acto, recalcó aquella acogida y la especial relevancia de aquel 18 de marzo ahora que "la guerra de agresión es para quedarse con el petróleo de Irak". El único extranjero hasta hoy que ha tenido la posibilidad de hablar en la plaza mexicana del Zócalo y gran amigo de Cuauhtemoc Cárdenas, Julio Anguita, calificó su presencia en el acto de "simbólica", en vísperas del conflicto bélico, a pesar de que no se prodiga en actos públicos.

La Comunidad de Estudiantes Mexicanos en Córdoba la integran unas cien personas. Ellos, con sus familias, llegan a esta ciudad para cursar estudios de postgrado y son profesionales de Sociología y Veterinaria, por citar algunos ejemplos. Después, regresan a su tierra de origen, donde tienen vínculos laborales con las instituciones públicas.