El sector oficialista del Partido Popular de Córdoba ya ha decidido quién va ser su candidato a la presidencia provincial del partido, ya que su actual jefe de filas, José Antonio Nieto, no puede volver a presentarse a la reelección. La dirección nacional de la formación ha decidido que su cargo orgánico es incompatible con su puesto institucional de secretario de Estado de Seguridad, en atención a los estatutos nacionales recientemente aprobados. La apuesta de este sector oficial es Adolfo Molina (Cabra, 1975), actual secretario general del PP y parlamentario andaluz por Córdoba.

La decisión de apoyar a Molina se tomó la tarde del pasado Miércoles Santo en un encuentro en el que participaron unas 30 personas. El grupo municipal del PP de Córdoba capital, el de diputados provinciales, parlamentarios andaluces y nacionales, alcaldes de la provincia y presidentes de juntas locales del partido fueron citados en el chalet del senador Jesús Aguirre para abordar la situación del relevo de Nieto al frente del partido.

Tras acompañar Nieto a la ministra de Empleo y Seguridad Social, Fátima Báñez, en el funeral del fundador de ATA, Lorenzo Amor, y en una visita a la hermandad de la Misericordia (iglesia de San Pedro) de la que el exalcalde es hermano, el todavía presidente provincial del PP se unió al grupo y expuso la situación de buscar a su sucesor. La cita se prolongó hasta las cuatro de la tarde (duró unas tres horas), ya que Nieto tenía previsto salir de nazareno con su cofradía. Ni siquiera comieron. «Que corra el escalafón», parece que se conjuraron los asistentes, que decidieron dar su apoyo a Adolfo Molina. Con esta opción piensan que se da continuidad al proyecto de Nieto, que confía en su número dos para el futuro. Molina conoce bien la provincia y las juntas locales de los municipios, así que su nombre será el que se proponga para presidente provincial del partido en la junta directiva del PP que se celebra mañana para fijar la fecha del congreso, que probablemente será el 3 de junio, una vez pasada la Feria de Mayo.

Si hubo consenso para designar a Molina, no lo hubo cuando se propuso al candidato a la secretaría general. En este caso candidata, pues surgió el nombre de la senadora Beatriz Jurado, que en los próximos días dejará la presidencia de Nuevas Generaciones. La propuesta de Jurado no está cerrada del todo. Hay algunos inconvenientes para apoyarla, aunque no se descarta que asuma ese puesto si al final la consigna es «que corra el escalafón». Por otro lado, existe la posibilidad de que la parlamentaria Rosario Alarcón presente una candidatura alternativa a la de Molina. Las dudas se despejarán a partir de hoy.