La delegada del Gobierno andaluz en Córdoba, Rafi Crespín, la alcaldesa, Isabel Ambrosio, y el delegado de Economía, Innovación, Ciencia y Empleo, Manuel Carmona, visitaron ayer las obras del Palacio de Congresos para comprobar su evolución, una vez que el Gobierno andaluz efectuó una encomienda de gestión a la empresa pública Tragsa para que finalizara las obras pendientes. Los representantes institucionales han podido ver las tareas que se están realizando y que se incluyen dentro de la segunda fase, que está centrada en la rehabilitación, mejora y adecuación del Palacio de Congresos. Entre ellas, destaca la remodelación del salón de plenos y ocho salas; el patio azul; obras de acondicionamiento de la zona exterior como son el adarve y el patio; obras de adecuación de instalaciones y de accesibilidad, y además redactar el proyecto de terminación de la muralla andalusí. Tanto la delegada de Gobierno como la alcaldesa se han mostrado «satisfechas» con la evolución de las obras, que, según la nota, se están desarrollando al ritmo previsto. En una nota de prensa, la Junta informa de que la principal transformación que han podido ver ha sido la que se está realizando en el salón de actos, que pasará de 500 a 757 plazas.

De forma paralela, la empresa Tragsa se encuentra redactando la tercera fase del proyecto centrado en la rehabilitación, mejora y adecuación tanto del Patio Mudéjar como de los espacios que hay en torno a él, apoyándose para ello en el plan funcional, ya terminado, y que expone la necesidad de adecuar el conjunto de los espacios modernizando sus instalaciones y adecuándolas al uso pretendido ganando el mayor número de estancias para usos relacionados con la industria congresual. Además, se está elaborando el pliego de condiciones para sacar a concurso la gestión del Palacio de Congresos, que como se acordó con empresarios y sindicatos definirá las cuestiones técnicas y administrativas a las que deberá ajustarse el procedimiento de adjudicación.