El presidente de la Agrupación de Cofradías de Córdoba, Francisco Gómez Sanmiguel, calificó ayer como "desafortunada" la declaración en la que la alcaldesa de la ciudad, Isabel Ambrosio, destacó en una entrevista concedida a Radio Nacional que la apertura de una segunda puerta en la Mezquita Catedral supone un "riesgo" para la distinción de este monumento como Patrimonio de la Humanidad. En esta línea, explicó que las afirmaciones de la primera edil "nos indican la falta de tener toda la información" sobre este proyecto, en el que el Cabildo trabaja desde hace tiempo con la Junta de Andalucía.

Sanmiguel subrayó que los cofrades representan "la agrupación de ciudadanos más grande" de Córdoba, ya que suman alrededor de 50.000 personas, y el rechazo a la actuación que facilitaría el tránsito de las hermandades por la Catedral supone "un daño emocional a un grupo importante de cordobeses". En la entrevista, la alcaldesa fue preguntada por la intervención de Begoña Bernal, presidenta de Icomos España (Comité del Consejo Internacional de Monumentos y Sitios Histórico--Artísticos), en el foro internacional Medina Azahara y las ciudades Patrimonio Mundial, donde insistió en que se opondrán a la apertura de la segunda puerta. Ambrosio precisó que "es verdad que la foto fija por la que la Mezquita Catedral consiguió ser Patrimonio de la Humanidad se modificaría sustancialmente y ese es un riesgo que verbalizó", añadiendo que "si lo que estamos poniendo en riesgo son intereses generales muy importantes, deberíamos pensar si merece la pena". En la tarde de ayer, Ambrosio precisó que "habría que pensárselo si se pone en riesgo real la declaración, como dijo la presidenta de Icomos". Sanmiguel manifestó que "los cofrades entendemos que la adaptación de una puerta no supone riesgo para el reconocimiento como Patrimonio".