Con ataúd de cartón y todo. Miembros de FETE-UGT representaron ayer en el Bulevar una jornada de luto por la educación en la que lanzaron "un ruego a los gobernantes en caridad por el sistema público de enseñanza". Lo hicieron sin autorización de la junta electoral de Córdoba, que a diferencia de las del resto de capitales andaluzas, encontró inapropiada la concentración debido a que "el tema de la educación ha estado en el debate político de los partidos y que podría influir en el voto", explicó Juan Carlos Hidalgo, secretario general de FETE-UGT Andalucía, que al igual que sus compañeros encontraron "absurdo" el argumento, ya que "en el resto de provincias ha sido aprobada y además el día 14 nos dijeron que sí y ayer nos denegaron el permiso". Ajeno a los trámites burocráticos y de la presencia policial que vigiló el desarrollo de la protesta, el sindicato, que aludió a los recortes realizados en comunidades como Madrid, Cataluña, Valencia, Navarra, Castilla La Mancha, Murcia o Galicia, reivindicó "que no se apliquen recortes de plantillas, que no se reduzcan los presupuestos para investigación del PDI, que no se supriman servicios complementarios, que no se suban las tasas universitarias ni se recorte en becas del alumnado ni se reduzcan las partidas para gastos de funcionamiento".