El proyecto de la biblioteca de los jardines de la Agricultura, que fue presentado el miércoles en el Ayuntamiento por representantes del Ministerio de Cultura, recibió ayer el respaldo de la Junta, grupos municipales y vecinos, aunque hubo algún reproche.

La delegada del Gobierno, Isabel Ambrosio, dijo que es un proyecto "compartido" entre Gobierno y Junta, ya que, aunque a la primera administración le toca construir, a la segunda le corresponde la gestión de los fondos. Añadió que "la Junta ha estado implicada desde la primera propuesta", porque es "un proyecto muy demandado, que necesita Córdoba", aunque le hubiera gustado que "la puesta en escena se hubiera compartido con la Consejería de Cultura", a la que "no se ha cursado invitación".

En el Ayuntamiento, la portavoz del grupo municipal socialista, Inmaculada Durán, manifestó que "es una buena noticia que empiecen las obras de un proyecto impulsado por el PSOE", que, "casi por una ocurrencia del alcalde, nos quedamos sin él" --en referencia al anuncio de buscar otra ubicación--. Pero, añadió, "por suerte, no se llevó a efecto, va a ser una realidad y la rosaleda se mantendrá en el lugar que le corresponde".

El portavoz de IU, Francisco Tejada, manifestó que es "una buena noticia ejecutar un proyecto en el que se ha trabajado durante bastante tiempo y que va a servir para reforzar la posición de Córdoba como ciudad relacionada con la cultura". Aún así, le parece "llamativo que salga adelante a pesar del alcalde, que ha demostrado estar bastante desafortunado".

Por último, el presidente del consejo de distrito Centro, Rafael Soto, dijo que le parece un proyecto "correcto", en el que "se ha respetado la rosaleda", utilizada como "referente". A pesar de que este colectivo, junto a otros, había reclamado otro espacio, concluyó que "es mejor de lo que había imaginado".