El hospital Reina Sofía acaba de presentar el resultado de una compleja operación de cirugía cardiovascular y de todo un ejemplo de solidaridad y cooperación de los que se ha beneficiado Álex, un joven boliviano de 19 años.

Álex llevaba en seguimiento desde hacía 5 años en el Reina Sofía hasta que se ha podido llevar a cabo la intervención para solucionar una cardiopatía congénita que presentaba este chico, una Tetralogía de Falot. La constancia de la madre de paciente, la médica de familia colombiana María Teresa Losada, que acogió a Álex como hijo suyo trabajando con población indígena en Bolivia, ha hecho posible que finalmente este joven pudiera ser operado en el hospital Reina Sofía de Córdoba, después de que su caso no fuera aceptado en otros hospitales españoles o de naciones como Argentina, Colombia o Chile. Álex se encuentra en estos momentos recuperándose de la grave operación, que se efectuó el pasado 12 de julio, y su madre, en la rueda de prensa que se acaba de celebrar en el hospital Reina Sofía, ha pedido que no se rompa "la cuerda de la solidaridad", que a ella, como médica de familia le permite ayudar a personas en situaciones de mucha pobreza y sin recursos sanitarios, cooperación que a su vez ha posibilitado que su hijo haya sido tratado por la sanidad pública andaluza.

Además de su grave problema de corazón, Álex presentaba una complicación añadida, ya que se quedó ciego en el 2003, cuando tenía solo 4 años, después de sufrir una complicación que no fue atendida de forma correcta tras ser intervenido quirúrgicamente en Bolivia. María Teresa Losada recordó que a partir de los 5 años la población de Bolivia carece de seguro sanitario universal, lo que conduce a la muerte a numerosas personas por problemas de salud que aquí en España son fácilmente solucionables.

UN AMPLIO EQUIPO

La cardióloga pediátrica María Ángeles Tejero, y el cirujano cardiovascular, Jaime Casares, ambos profesionales del Reina Sofía que han participado junto a un amplio equipo en este caso, esperan que su evolución sea buena, y que su calidad de vida sea óptima en las próximas décadas, sin contemplarse de momento ninguna nueva intervención. La operación fue llevada a cabo por los cirujanos cardiovasculares Carlos Merino y Jaime Casares y en su seguimiento y preparación han intervenido un amplio equipo de profesionales.

El Reina Sofía es centro de referencia andaluz para cardiopatías congénitas complejas y también centro de referencia del Servicio Andaluz de Salud acreditado para trasplante cardiaco pediátrico. Cuenta con más de 35 años de experiencia en este ámbito y hasta la actualidad cerca de 2.800 pacientes han sido valorados por los profesionales del hospital cordobés.

La Tetralogía de Fallot, comunicación interventricular, es una de las malformaciones más habituales que se intervienen en el Reina Sofía, normalmente antes del primer año de edad, porque así la evolución del corazón y del paciente es mucho mejor. "Se trata de un problema que aquí en nuestro medio se puede diagnosticar desde la etapa prenatal, por lo que cuando el menor nace se programa la operación, entre los primeros días y el primer año de vida". añadió María Ángeles Tejero.