El proyecto de hotel de la empresa Arete 2016, que ha estado en exposición pública hasta ayer, prevé mantener la configuración del edificio del convento en torno a los patios, conservando el acceso a través del compás. El proyecto hace hincapié en que el edificio conservará su carácter habitacional colectivo completado con zonas monumentales para usos comunes y áreas de servicio. Así, la iglesia, que ya no tiene la mesa de altar con el ara y las imágenes que recibían culto, será un salón de usos múltiples.

El hotel, presupuestado en 4,9 millones y con un plazo de ejecución de diecisiete meses, tendrá 70 habitaciones, de las que 31 estarán ubicadas en la planta baja, en la que habrá 23 dobles sin patio, cuatro dobles con patio, una adaptada con terraza, y tres individuales. En la planta primera estarán las 39 habitaciones restantes, de las que 29 serán dobles sin terrazas, cinco dobles con terraza, una adaptada con terraza, una junior suites y tres individuales.

La fachada seguirá igual, aunque la portada neobarroca de la calle Santa Isabel será eliminada y sustituida por una ventana de tamaño y proporciones similares a otra existente en el mismo lugar. El proyecto contempla también la modificación de los huecos de la fachada que da a Conde de Priego.

En la planta baja irán cuatro habitaciones en torno a dos patios en la zona de la hospedería; dos en la parte que hay entre el compás y la fachada a Santa Isabel; y 24 en torno a cuatro patios (claustro, de la iglesia, del obrador y del refectorio). De las 39 de la planta alta, cuatro irán en la hospedería (dos de ellas, con terrazas y salón de acceso); y las 35 restantes se distribuirán en torno a cinco patios (San Miguel, claustro, de la iglesia, del obrador y del refectorio) y a la terraza azotea.