Los dirigentes provinciales del PSOE y del PP de Córdoba valoraron ayer el proyecto de presupuestos de la Junta para el 2018 de forma diametralmente distinta. El secretario general electo del PSOE de Córdoba, Antonio Ruiz, calificó las cuentas de la Junta de Andalucía como «sociales» y enfocadas a «la igualdad y para las personas», y destacó como proyecto importante de infraestructuras para la provincia el tren de cercanías entre Palma del Río y Villa del Río, fundamental «para la vertebración de esta tierra y porque lo llevamos reclamando mucho tiempo». Respecto a este proyecto del tren de cercanías, Antonio Ruiz, como presidente de la Diputación, anunció que desde la institución provincial también se va a incorporar una partida en sus presupuestos del 2018 para reforzar esta red viaria.

De otra parte, el dirigente socialista valoró que Andalucía es la primera comunidad autónoma de España que cuenta con un proyecto de presupuestos para el 2018, mientras que se prevé que «tal como está el panorama nacional, habrá unos presupuestos nacionales prorrogados y Córdoba volverá a ser la última provincia en inversiones». Ruiz criticó que en Andalucía, «PP y Podemos son «dos extraños que se tocan y se abrazan», y han anunciado enmiendas a la totalidad.

Los cuatro parlamentarios del PP de Córdoba en la Cámara andaluza, por su parte, no ahorraron ayer calificativos negativos para describir el proyecto de presupuestos de la Junta, que vuelve a dejar a la provincia «a la cola de Andalucía» en cuanto a inversiones previstas. Mientras que el diputado y presidente del PP de Córdoba, Adolfo Molina, los calificaba como los del «día de la marmota de la realidad andaluza» y criticó su «falta de transparencia», Rosario Alarcón consideró que «suponen un engaño perpetuo de partidas que no se llegan a ejecutar». Para Miguel Ángel Torrico, son unos «presupuestos de corta y pega de los del año pasado, de ahí la razón de que no sean transparentes», y María de la O Redondo puso ejemplos de la «estafa» que suponen para Córdoba, con partidas que «no cuadran con el tiempo de ejecución» de los proyectos.